El presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, dijo el 1 de marzo en un posteo de Twitter que el Congreso podría declarar nulos los acuerdos de financiamiento que firmó Maduro –el sucesor que eligió el extinto Hugo Chávez- una vez que este deje de ser presidente. “Advertencia a los acreedores extranjeros: los contratos de interés nacional que firmó el gobierno chavista sin la aprobación de la Asamblea Nacional serán nulos e inválidos”, dijo Allup, que tiene 783,000 seguidores en Twitter. El posteo se retuiteó 11,000 veces y halló eco en José Guerra, el presidente de la Comisión de Finanzas.
La amenaza llega en momentos en que la compañía estatal Petróleos de Venezuela SA mantiene conversaciones con China por dinero que contribuiría a que la empresa pagara US$ 1,000 millones de bonos con vencimiento en octubre.
PRESTADO
Desde 2007, el país asiático le ha prestado más de US$ 57,000 millones a cambio de petróleo al miembro de la OPEP, que cada vez está más necesitado de dinero. El tweet de Allup representa el último episodio de la lucha por el poder que libran Maduro y una oposición resurgente que obtuvo una fuerte victoria en las elecciones de diciembre luego de prometer revertir más de una década de controles socialistas de la economía.
“Si China no envía más dinero, Venezuela va a tener un verdadero problema”, dijo Russ Dallen, un socio gerente de Latinvest en Miami. “Esto tiene un efecto escalofriante en la inversión en el país. Es la opción nuclear. La oposición no puede librar una guerra convencional porque el gobierno controla todos los resortes del poder, incluidas las armas. Cortarle a Maduro el acceso al dinero es lo único que pueden hacer, y es lo más efectivo”.