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El Gobierno de Alemania espera gastar unos 93.600 millones de euros hasta finales de 2020 en la acogida de refugiados, dijo el semanario alemán Der Spiegel el sábado, citando un documento del Ministerio de Hacienda alemán.
Los cálculos del ministerio incluyen los costos relacionados con el alojamiento y la integración de los refugiados, así como los fondos necesarios para abordar los motivos del éxodo de cientos de miles de personas que huyen de la guerra o de la pobreza.
La cifra podría alentar las preocupaciones, en particular entre los crecientes movimientos anti-inmigración, sobre el impacto de la crisis de los refugiados en la economía alemana, que acogió el año pasado más de un millón de personas, sobre todo de Siria y de otras zonas de guerra.
El número de inmigrantes ha caído este año tras el acuerdo firmado entre la Unión Europea y Turquía, que fue diseñado para otorgar a los turcos la exención de solicitar visados en sus viajes a Europa a cambio de detener el flujo de inmigrantes.
El Gobierno alemán prevé la llegada de 600.000 refugiados en este año, 400.000 el próximo año y 300.000 en cada uno de los años siguientes, según el informe, añadiendo que se espera que el 55 por ciento de los refugiados reconocidos encuentren un trabajo después de cinco años.
Un portavoz del Ministerio de Hacienda se negó a comentar estas informaciones. Según el documento, se necesitarían 25.700 millones de euros para los pagos por desempleo, subsidios de alquiler y otros beneficios para los solicitantes de asilo reconocidos hasta finales de 2020. Además, serían necesarios otros 5.700 millones de euros para los cursos de idiomas y 4.600 millones para medidas para ayudar a los inmigrantes a conseguir trabajo.
