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El destino carcelario de Alejandro Toledo no parece sorprender a quienes conocieron con cierta cercanía la historia de aquel clan familiar ancashino marcado por el escándalo que hasta estuvo involucrado en el robó de una agencia del Banco de la Nación.
El periodista Umberto Jara ha escrito el libro ‘Historia de dos aventureros’, en el que da cuenta de las andanzas de Celestino Toledo y Eliane Karp antes y después del año 2001, ese parteaguas político que marcó sus vidas.
‘Yo creo que Toledo está recogiendo el final que le corresponde porque ¿qué es Toledo? Es un delincuente, es un hombre que ha ejercido la Presidencia de la República y ha tenido el disfraz de político, pero su ejercicio como tal y luego como presidente ha sido siempre la búsqueda del dinero ilegal, entonces no es ninguna sorpresa que esté teniendo este destino’.
‘Creo que hay una coherencia, es lo que le correspondía por todo lo que ha hecho, pero además es un destino que está muy ligado a su familia. Su padre estuvo preso por organizar invasiones de tierras en Chimbote en los años 50, un hermano suyo estuvo preso por robar en el Banco de la Nación, de modo que Toledo ha sido en su familia el más destacado en el ejercicio de la delincuencia’, anotó.
