El informe final de la comisión Lava Jato concluyó que Luis Castañeda Lossio, debe ser investigado por un presunto tráfico de influencias en proyecto Línea Amarilla
Congreso recomendó denunciar ante la Fiscalía y la Contraloría General de la República al saliente burgomaestre junto a la ex alcaldesa Susana Villará
Luis Castañeda Lossio se quedó más mudo que nunca. ¿La Razón? El informe final de la comisión Lava Jato, que concluyó que el saliente alcalde de Lima, debe ser investigado por un presunto tráfico de influencias en proyecto Línea Amarilla.
La presidenta de la Comisión Lava Jato del Congreso, Rosa Bartra, recomendó denunciar ante la Fiscalía y la Contraloría General de la República al burgomaestre limeño, Luis Castañeda, y a la ex alcaldesa Susana Villarán por los supuestos malos manejos en los contratos de la Línea Amarilla y Vías Nuevas de Lima.
Durante la sustentación del informe final, Bartra indicó que habría indicios en el delito de negociación incompatible y responsabilidades administrativas contra Castañeda y Villarán.
También recomienda a la Fiscalía que emita el pronunciamiento correspondiente sobre los indicios de la presunta comisión de los delitos de negociación incompatible, colusión, tráfico de influencias, asociación ilícita, cohecho pasivo impropio, cohecho activo genérico, entre otros.
Bartra informó que los funcionarios Lucy Zegarra Flores, gerente de Promoción de la inversión privada de la Municipalidad Metropolitana de Lima; Domingo Arzubialde Elorrieta, gerente; Jaime Villafuerte Quiroz, gerente de Promoción y Víctor Madueño Díaz, subgerente de Promoción, también estarían involucrados.
En su exposición, la legisladora propuso que el presente informe sea remitido a la Contraloría para que realice las indagaciones correspondientes a efectos de establecer responsabilidades en las modificaciones al contrato de concesión del proyecto Vías Nuevas de Lima, a través de la firma del Acta de Acuerdo del 11 de noviembre del 2016.
De igual manera, plantea iniciar las respectivas auditorías a los ingresos por recaudación de los peajes, a fin de determinar si se ha configurado la ruptura del equilibrio económico de los contratos de concesión o la rentabilidad económica esperada. Además, realizar las indagaciones correspondientes a efectos de establecer responsabilidades en la suscripción del contrato de concesión del proyecto Vías Nuevas de Lima.
En mayo pasado, luego de no asistir a las tres primeras citaciones y bajo la amenaza de ser citado bajo fuerza, Luis Castañeda Lossio, alcalde de Lima, se presentó ante la comisión Lava Jato, que preside Rosa Bartra, para responder por las presuntas irregularidades que hubo en su mandato, entre 2007 y 2010, y del 2015 al 2018.
En la sesión, el burgomaestre negó haber tenido alguna participación en la concesión del proyecto Línea Amarilla , adjudicado por la constructora brasileña OAS. De acuerdo con Castañeda, ello está prohibido en la Ley de Municipalidades.
La autoridad también se pronunció sobre las comunicaciones de 2014 entre José Pinheiro, entonces presidente de OAS, y Giselle Zegarra, ex gerente de la Promoción de Inversión Privada de la Municipalidad de Lima.
Castañeda aseguró que se trató de una “comunicación entre privados” y descartó que tenga conocimiento de lo que se habló o que haya tenido alguna intervención.
OTROS RIESGOS
Tras una Acción Simultánea realizada por la Contraloría General se dio a conocer una serie de riesgos en los sistemas contraincendios y en el sistema de monitoreo de los niveles de presión de agua, en el túnel del proyecto Línea Amarilla.
El informe advierte que los extintores instalados en el túnel no cumplen con las especificaciones establecidas en el Estudio Definitivo de Ingeniería (EDI) y en las Normas Técnicas Aplicables, generándose el riesgo ante una situación de emergencia.
También se dio a conocer dificultades en el acceso a dichos extintores, como por ejemplo la distancia al extintor más cercano, siendo esta de 38.36 metros, superando en 23.36 metros a la distancia establecida en el EDI y en la normativa aplicable (15.00 metros). Asimismo, se identificó la falta de extintores en las salidas del túnel.
La falta de sustento técnico en el sistema de monitoreo de presión del agua sobre el túnel implementado por el concesionario, sería otro problema presente en el proyecto. Generando el riesgo de no garantizar la seguridad estructural y el adecuado funcionamiento del túnel.
De esta manera, el equipo de auditores evidenció que los informes técnicos elaborados por el concesionario respecto al sistema de monitoreo, no cuentan con el sustento técnico relacionado. Así como la ubicación de la red de medición, la profundidad, los parámetros de medición y el tipo y características de los equipos para medir el nivel de presión de agua en función a las condiciones hidrogeológicas propias del túnel.
Por tal motivo, la Contraloría comunicó a la Gerencia de Promoción de la Inversión Privada de la Municipalidad Metropolitana de Lima de estos riesgos identificados a fin que disponga las medidas inmediatas que permitan superar estas incidencias.
Cabe destacar que el proyecto de la Línea Amarilla, tiene por objetivo mejorar la fluidez del tránsito para quienes transiten de San Juan de Lurigancho, al Callao. Cuenta, entre otros componentes de infraestructura, con un túnel construido debajo del Río Rímac de aproximadamente 1.6 km. de longitud.