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La reapertura de fronteras tras 20 meses de cierre por la covid-19 y el fútbol -con la celebración de las tres finales continentales en Montevideo y el cese de Óscar Washington Tabárez como técnico de la selección tras más de 15 años- fueron algunos de los asuntos más destacados en 2021 en Uruguay.
El país, que mantuvo su concepto de “libertad responsable” en la gestión de la pandemia y alcanzó un alto nivel de vacunación respecto a sus vecinos, vio, además, la salida de su primer ‘unicornio’ al índice Nasdaq de Nueva York.
En este país laico donde el fútbol es religión, la salida del seleccionador Óscar Washington Tabárez tras una serie de malos resultados en las eliminatorias sudamericanas del Mundial 2022 se convirtió en un debate nacional.
El 19 de noviembre se anunció su cese tras más de tres lustros, en los que Uruguay conquistó una Copa América, finalizó cuarta en el Mundial de Sudáfrica y tuvo a sus futbolistas como figuras de los equipos más importantes del mundo.
Entre el 20 y el 27 de noviembre, Montevideo se vistió de gala para recibir las finales de las Copas Sudamericana, Libertadores femenina y masculina, un hecho hasta ese entonces inédito en los torneos de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol).
Cinco equipos brasileños y un colombiano lucharon por los títulos continentales y fueron el Palmeiras, el Athletico Paranaense y el Corinthians los que celebraron en un macroevento que aunó deporte y negocio, pues la llegada de decenas de miles de aficionados supuso ingresos extra para el castigado sector turístico.
Vinculada a la noticia anterior, el recinto que albergó la primera final de la historia de un Mundial (1930), el Estadio Centenario, fue sometido durante varios meses a un proceso de remodelación, que incluso llevó a la selección a jugar fuera de su escenario natural, para recibir las finales de la Sudamericana y la Libertadores.
La inyección económica de 6 millones de dólares de la Conmebol permitió renovar la zona de prensa, las cabinas, los vestuarios y las tribunas, además de instalar luces de última tecnología y un césped trasladado desde Brasil para elevar al Centenario a la categoría de aspirante a ser sede del Mundial 2030.
