Las malas decisiones de Richard Acuña, el controvertido fichaje de Paolo y la crónica del descenso de César Vallejo

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César Vallejo tuvo un año desastroso y descendió de categoría junto con Mannucci y Unión Comercio. Richard Acuña, quien recientemente manifestó su intención de presidir la Federación Peruana de Fútbol, tendrá que reconsiderar sus planes. ¿Cuáles fueron las razones detrás de este resultado para los ‘Poetas’?

César Vallejo sumó el segundo descenso en su historia. (Foto: Liga 1)

Con expresiones de consternación, miradas perdidas y lágrimas, el pasado sábado se selló el descenso de César Vallejo a la Liga 2, y sus jugadores presenciaron cómo se materializaba su peor pesadilla. Richard Acuña, presidente del club, los miraba desde lo alto del Estadio Campeones del 36, reviviendo en su mente las decisiones erróneas tomadas durante la temporada que llevaron a este desenlace, aún más amargo que el descenso de 2016, del cual se recuperaron tres años después.

Este descenso resulta más doloroso que el de hace ocho temporadas, ya que se hizo una mayor inversión y el equipo había logrado clasificar a la fase preliminar de la Copa Sudamericana tras un segundo semestre de 2023 bastante aceptable. Sin embargo, a pesar de reforzar su plantilla con nombres que brillaron en la Liga 1, con el tiempo se evidenció que solo habían formado un conjunto de jugadores sin dirección ni liderazgo, incapaces de competir con los grandes y de aspirar a un torneo internacional. Los ‘Poetas’ intentaron aprovechar la gloria pasada de estos jugadores, y acabaron pagando un alto precio por ello.

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Paolo Guerrero y los fichaje para el olvido

La temporada de César Vallejo arrancó con Roberto Mosquera al mando, quien había sido contratado a mediados del 2023 en sustitución de Sebastián Abreu y contó con el respaldo de la directiva por su destacada labor. No obstante, mientras el equipo regresaba de una exigente pretemporada en Uruguay, donde participó en varios amistosos, la gerencia deportiva preparaba el fichaje estelar de Paolo Guerrero, con la intención de anunciarlo de manera espectacular. Buscaban no solo impactar en el mercado futbolístico, sino también fortalecer la imagen de la marca del club a través del marketing.

Desafortunadamente para el equipo de Trujillo, la relación con Paolo Guerrero estuvo marcada por constantes desacuerdos desde el anuncio de su incorporación, y nunca se alineó con los objetivos de la institución. Desde su rechazo a cumplir el contrato después de ser presentado en redes sociales en febrero, hasta su polémica salida tras conflictos con Guillermo Salas y negarse a jugar en un encuentro contra Alianza Lima, la presencia del ‘Depredador’ en Trujillo generó inestabilidad y disputas en César Vallejo.

Además de Paolo Guerrero, César Vallejo sumó a su plantilla a jugadores como Nilson Loyola, Josepmir Ballón, Johan Madrid, Cristian Benavente, José Carvallo, Alec Deneumostier y Édgar Benítez. Con estas incorporaciones de jugadores de renombre pero de rendimiento incierto, el equipo tuvo un comienzo de temporada titubeante. A pesar de clasificar a la fase de grupos de la Copa Sudamericana al vencer a Sport Huancayo, su desempeño en la Liga 1 fue inconsistente. Roberto Mosquera dejó la dirección técnica en la fecha 7 del Torneo Apertura, siendo reemplazado por Guillermo Salas, quien asumió el reto de reconducir la situación.

‘Chicho’ intentó darle una identidad de juego a su equipo, pero no lo logró. En la Copa Sudamericana, se despidieron en último lugar del Grupo A, quedando detrás de Defensa y Justicia, Always Ready e Independiente Medellín. Lo más destacable de César Vallejo en el Torneo Apertura fue que no perdieron ningún partido en casa –ganaron cuatro y empataron cuatro–; sin embargo, como visitantes tuvieron un rendimiento pendiente, con la esperanza de mejorar en la segunda mitad de la temporada –cuatro empates y cinco derrotas–.

Con el Torneo Clausura en curso y sin Paolo Guerrero, la falta de acierto en la dirección deportiva quedó evidente al iniciar negociaciones para fichar a Christian Cueva. El mediocampista, que había jugado con la selección peruana en la Copa América, no había disputado un partido oficial a nivel de clubes desde octubre del año anterior, generando varias dudas sobre su contratación. Aunque no se concretó, esta situación coincidió con la salida de Guillermo Salas después de la sexta fecha, dejando un balance negativo: cinco victorias, seis empates y diez derrotas, entre la Liga 1 y la Copa Sudamericana.

Luis Hernández tomó el mando técnico de César Vallejo por lo que quedaba del Torneo Clausura, con la misión principal de evitar el descenso. La prioridad era la tabla acumulada, buscando no repetir la historia de 2016, sabiendo que la inversión realizada al inicio del año tenía como objetivo competir por logros mayores, no luchar contra el descenso. No obstante, los ‘Poetas’ no mostraron mejoría y conforme avanzaban las jornadas, el equipo se hundía más. Los números son claros: si en el Apertura sumaron 20 puntos, en el Clausura apenas alcanzaron 10, haciendo casi imposible cambiar la situación.

Entre los rivales directos en la lucha por evitar el descenso, César Vallejo solo logró vencer a Unión Comercio (2-1). En casa, empató con Sport Boys (2-2) y Alianza Atlético (0-0), y fue derrotado por Carlos A. Mannucci en la penúltima fecha (0-2); mientras que de visitante, perdió contra Comerciantes Unidos (2-0). Esta última derrota ante el ‘Tricolor’ fue determinante en la definición de la última jornada, obligando al equipo de ‘Manzanita’ Hernández a ganar contra Atlético Grau en Sullana para aspirar a la permanencia.

La tarea en el estadio Campeones del 36 se presentaba casi imposible, ya que los albos no habían perdido ningún partido como locales en el Clausura y, durante todo el año, solo sufrieron una derrota. Por otro lado, César Vallejo fue el segundo peor equipo visitante de la temporada, con cuatro empates y trece derrotas. La realidad confirmó la predicción: los locales ganaron 3-1 y los trujillanos no mostraron resistencia para seguir en la Liga 1. Ahora, deben replantear sus objetivos si desean que su equipo regrese a la Primera División para la temporada 2026. Por el momento, solo les queda aceptar que descendieron con justicia.

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