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El papa Francisco anunció una colecta especial que se realizará el 24 de abril en todas las iglesias católicas de Europa para recaudar fondos en ayuda del pueblo de Ucrania.
Ante decenas de miles de personas al final de la misa dominical en la Plaza de San Pedro, el Papa dijo que deseaba que la colecta fuera "un gesto de caridad que, además de aliviar el sufrimiento material, demuestre mi cercanía personal y la de toda la iglesia" al pueblo de Ucrania.
La violencia se ha intensificado recientemente en el este de Ucrania, donde las fuerzas del Gobierno se enfrentan a los rebeldes apoyados por Rusia, según grupos activistas internacionales.
La implementación de un acuerdo alcanzado en Minsk el año pasado, que podría permitir levantar las sanciones contra Rusia, y una pausa en la violencia a finales de 2015 habían generado esperanzas de que el conflicto se resolviera pronto. Más de 9.000 personas han perdido la vida por los combates.
La gran mayoría de cristianos que viven en Ucrania son ortodoxos, pero hay cerca de un millón de católicos romanos y alrededor de cuatro millones de miembros de la Iglesia Católica Oriental.
El Papa no especificó cómo sería distribuida la ayuda. Existen cerca de 120.000 parroquias católico-romanas en Europa, y el mayor número de ellas – 27.000 – se concentra en Italia.
El portavoz del Papa, Federico Lombardi explicó a su vez a los periodistas que el Consejo del Papa, Cor Unum, coordinará la recogida de fondos.
Lombardi subrayó que los fondos recolectados "se destinarán para apoyar a toda la población y a los refugiados, independientemente de su religión".
