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El acceso a agua segura es esencial para la salud y el bienestar de las familias, especialmente en las zonas rurales del Perú, donde los desafíos en materia de saneamiento son frecuentes.
¿Qué es la Cloración y Por Qué Es Tan Importante?
La cloración es un proceso químico que consiste en agregar cloro al agua con el objetivo de eliminar microorganismos peligrosos, tales como bacterias, virus y parásitos, que pueden provocar enfermedades graves. En el ámbito rural peruano se utiliza, predominantemente, hipoclorito de calcio al 70 % para la desinfección, debido a su eficacia comprobada. Este agente desinfectante se ha convertido en el más empleado, ya que además de eliminar patógenos, se mantiene en el agua durante largos periodos, previniendo la recontaminación a lo largo del proceso de distribución hasta los hogares.
Implementación en las Comunidades Rurales
El éxito del proceso de cloración radica en la capacitación y participación de los mismos pobladores, quienes se convierten en operadores de los sistemas de agua. Bajo la supervisión del responsable del Área Técnica Municipal (ATM) o del gobierno regional, las comunidades aprenden a dosificar y aplicar el cloro de manera segura y efectiva. Esta autonomía en la gestión de sus recursos hídricos permite un control constante y sostenible sobre la calidad del agua, haciendo que los proyectos de saneamiento tengan un impacto duradero.
Cálculo de la Dosificación de Cloro
Para que la cloración sea efectiva es esencial determinar la cantidad de cloro necesaria. Este cálculo se basa en dos variables clave:
- El número de la población beneficiaria: Permite estimar el volumen de agua que se debe desinfectar con base en el consumo diario.
- El caudal máximo diario del afluente: Conocer el flujo máximo de agua ayuda a establecer una dosis adecuada que asegure la eliminación de microorganismos sin exceder los parámetros seguros.
Según la normativa vigente, el agua debe presentar una concentración superior a 0.5 mg/l de cloro libre residual en el punto final de distribución, para considerarse apta para el consumo humano. Este estándar garantiza que, desde el momento de la cloración hasta que el agua llega a la vivienda, se mantenga un nivel constante de desinfección que prevenga la recontaminación.
Metodología y Ventajas del Proceso de Cloración
El Ministerio de Vivienda utiliza una metodología probada que involucra la aplicación de hipoclorito de sodio y calcio. Estos insumos se presentan en forma líquida o sólida, lo que facilita su dosificación, incluso en entornos con recursos limitados y de difícil acceso técnico. La combinación de estos productos permite una aplicación flexible y adaptada a las necesidades específicas de cada zona rural, asegurando que el agua siempre cumpla con los estándares de seguridad.
Entre las múltiples ventajas de este proceso destacan:
- Reducción de enfermedades gastrointestinales: Al eliminar microorganismos patógenos, se disminuye notablemente el índice de infecciones, lo que se traduce en una mejora evidente en la salud de la población.
- Sostenibilidad y accesibilidad: El bajo costo y la facilidad de aplicación del cloro hacen de la cloración un método viable y repetible, capaz de cubrir un amplio número de comunidades con recursos limitados.
Impacto y Alcance Desplegado
Solo durante el año 2024, el PNSR logró la cloración de 15,194 sistemas de agua, beneficiando a aproximadamente 2.9 millones de personas a nivel nacional. Este logro ha sido posible gracias a la correcta asignación de recursos y al traslado de presupuestos a nivel local para la compra de insumos de cloración.
El proceso de cloración del agua resulta esencial para garantizar el acceso a agua potable en las zonas rurales del Perú, gracias a la capacitación de los operadores, la correcta dosificación y el uso de insumos accesibles.
Este método no solo previene enfermedades, sino que también fortalece el derecho fundamental de las personas a contar con servicios básicos de saneamiento, marcando un paso importante hacia el desarrollo integral y la equidad en el acceso a recursos vitales. El compromiso del Gobierno en expandir estos servicios a las zonas más alejadas demuestra una visión centrada en la protección y mejora de la vida de todos los ciudadanos, sin distinción de geografía ni condición socioeconómica.
