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El conflicto armado entre Israel y Líbano podría causar cambios en el encuentro de Al Nassr en la Liga de Campeones de Asia, dificultando la participación de Cristiano Ronaldo en el campo.
Recientemente, el aumento de tensiones en el Medio Oriente ha generado preocupación en la región, con la posibilidad de un conflicto bélico inminente tras la invasión israelí en el sur del Líbano y la subsiguiente respuesta aérea de Irán. Este panorama ha complicado las perspectivas de negociación para la paz. La situación también ha afectado al fútbol, poniendo en riesgo la realización de la Liga de Campeones de Asia. El equipo Al Nassr, donde juega Cristiano Ronaldo, está considerando pedir un cambio de sede para su próximo partido debido a los riesgos en la zona.
Mientras se aguarda un comunicado oficial de las autoridades, las actividades parecen desarrollarse con normalidad. La Federación de Fútbol de Israel ha anunciado sin contratiempos la nómina de jugadores seleccionados para los próximos encuentros de la Nations League. Los ‘Azules y Blancos’ tienen previsto enfrentarse a Francia en Budapest y a Italia en condición de visitante, disipando así las dudas sobre la realización de estos partidos.
No obstante, la inquietud se mantiene debido a la expectativa creada por los eventos recientes. A pesar de que los misiles lanzados hacia Israel fueron visibles en el cielo durante los partidos del Persépolis contra el Pajtakor de Uzbekistán y del Sepahan contra el Isfahan, los juegos no se cancelaron, lo que muestra una normalidad atípica en comparación con lo que se esperaría en otras regiones del mundo.
El Al Nassr comenzó su participación en el torneo con un empate de 1-1 en su visita al Al Shorta de Irak, partido en el que ‘CR7’ no jugó. En la segunda jornada, el delantero portugués marcó el gol decisivo para ganar contra el Al Rayyan de Qatar, con un resultado final de 2-1. Actualmente, el equipo de Arabia Saudita se encuentra en la cuarta posición de la zona oeste, acumulando cuatro puntos, dos menos que Al Hilal y Al Ahli, y uno más que Esteghlal, su próximo rival.
