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La candidata presidencial del Frente Amplio, Verónika Mendoza, ofreció la implementación de un nuevo modelo económico para el país, para que el bolsillo de las familias se reactive, así como el cambio de la Constitución Política del Perú.
Durante su intervención en el debate presidencial dijo que el cambio es necesario para que el sector económico peruano salga de la situación de estancamiento en el que se encuentra.
“Dependemos de la exportación de minerales y cuando los precios de estos se caen, se frena la economía”, acotó.
Propuso además un cambio en lo que respecta al Estado, para que este sea “activo y transparente, al servicio de la gente, que nos defienda de los abusos y monopolios”.
Sostuvo que el sector público debe “reactivar la economía de las familias, aumentando el sueldo mínimo vital, garantizando crédito barato para los empresarios, promoviendo la diversificación productiva e invirtiendo donde se necesita”.
Mendoza manifestó también que a través del Plan Nacional de Masificación del gas, doce millones de personas se beneficiarán con dicho producto a bajos precios.
Anotó que su grupo político “es el único que propone en su plan de gobierno recuperar nuestra soberanía sobre los recursos para que puedan servir a nuestro pueblo”.
En otro momento recalcó también su voluntad de promover la aprobación de una nueva Constitución, y en ese sentido negó que el crecimiento económico del país se haya basado en lo señalado en la actual carta magna, la que calificó de “fujimontesinista”.
Afirmó que ese fenómeno responde, más bien, “al trabajo y sacrificio de los peruanos que dignamente sacan adelante a sus familias y a nuestro país”, dijo.
Ya durante la etapa de lectura de preguntas de los ciudadanos, Mendoza señaló que un eventual gobierno suyo será “drástico” frente a la minería ilegal.
