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Confía en que el Real Madrid pueda dar vuelta al resultado.
El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, pidió a su equipo mantener la calma después de que sus esperanzas de ganar la Liga de Campeones sufrieran un revés, tras perder el miércoles por 2-0 ante el Wolfsburgo en el partido de ida de cuartos de final.
El francés, que ocupa desde enero el puesto de Rafa Benítez, dijo que el 10 veces campeón de Europa todavía podía dar la vuelta al resultado la semana que viene en Madrid ante el Wolfsburgo, equipo que disputa por primera vez unos cuartos de final.
"Siempre es decepcionante perder un partido de Champions, sobre todo la forma en la que lo perdimos", dijo el entrenador a periodistas. "Pero tenemos que mantener la calma y estar unidos".
"Ahora no nos vamos a volver locos. Tenemos que creer y saber que tenemos por delante un partido difícil y ver si podemos darle la vuelta. Esto es lo que sucede cuando no se juega con intensidad", añadió.
"Tenemos que descansar y pensar en el partido de vuelta porque tenemos la oportunidad de cambiarlo todo", dijo Zidane, que ganó el título de Champions como jugador del club español en 2002.
El Real Madrid llegó al partido respaldado por su victoria del sábado por 1-2 en el clásico ante el Barcelona y sabiendo que la Champions sigue siendo la opción más segura de conseguir un trofeo esta temporada.
Zidane aparentemente había cambiado la racha de su equipo tras ganar los últimos seis partidos en todas las competiciones hasta el miércoles, pero a pesar de un enérgico comienzo, el conjunto madrileño sufrió su primera derrota en la Champions esta temporada.
El Wolfsburgo consiguió un colchón de dos goles en siete minutos, gracias a Ricardo Rodríguez y Maximilian Arnold, a pesar de la presión ejercida por el Madrid en la primera parte.
