MENU
De acuerdo a los resultados oficiales de la votación del domingo, emitidos por la Onpe, la conformación del próximo Congreso de la República tendrá a Fuerza Popular con mayoría absoluta, posiblemente con 68 a 70 escaños de los 130.
Este es un hecho que no se registraba desde el año 1995, cuando el entonces presidente Alberto Fujimori Fujimori, padre de la candidata presidencial Keiko Fujimori Higuchi, obtuvo su primera reelección en primera vuelta sobre Javier Pérez de Cuéllar (UPP) y alcanzó 67 curules.
En ese entonces el Congreso estaba conformado por 120 parlamentarios y el fujimorismo, ya en el gobierno, acaparó todas las comisiones legislativas y dejó a los grupos de oposición como simples espectadores. Lo que pasó después es ya historia conocida.
Hoy, Keiko Fujimori todavía no es Presidenta de la República, solo ha pasado a la segunda vuelta, con la más alta votación, en la que disputará ese cargo con Pedro Pablo Kuczynski.
Pero ante la posibilidad de ser elegida y contar con mayoría absoluta en el Congreso ha dado lugar a algunos grupos de expresar sus temores de que la historia se repita, lo que corroboraría la posición de los antifujimoristas y el miedo a un nuevo gobierno totalitario.
La reelecta congresista Cecilia Chacón, en una entrevista del lunes, ha afirmado que el preso ex presidente Alberto Fujimori -quien cumple condena por delitos de corrupción y de lesa humanidad- “tiene que salir por la puerta grande” de la prisión. Deploramos estas declaraciones, pues acrecientan esos temores y las especulaciones de que la candidata de Fuerza Popular no cumplirá el compromiso que firmó el día del debate presidencial, una semana antes de las elecciones.
Se hizo necesaria una aclaración de Keiko Fujimori, y así lo hizo ayer. Ratificó que no utilizará el poder político para favorecer a su padre y dejará que el Poder Judicial determine su situación legal. Reafirmó también que el fujimorismo no acaparará las comisiones en el Congreso y que, incluso, dejará las de Fiscalización e Inteligencia a cargo de la oposición.
Sin embargo, sería bueno que la señora Keiko Sofía Fujimori Higuchi asuma una suerte de control sobre quienes representarán a su agrupación política en el próximo Congreso de la República, como la congresista Cecilia Chacón, porque solo siembran dudas y temores de que volvamos a vivir épocas ya desterradas de nuestra vida republicana. Estamos ante la próxima elección de un cuarto gobierno democrático consecutivo y lo mejor que le puede pasar al Perú, previo al bicentenario nacional, es mantener y reforzar el mejor de los sistemas, con libertades plenas y equilibrio de poderes.
Quizá la emoción por la abrumadora victoria electoral ha hecho que algunos representantes brinden ese tipo de declaraciones. La congresista Martha Chávez, quien no estará en el próximo Parlamento, se mantuvo en silencio durante la campaña electoral, pero el lunes la rompió para enfrentarse al gobierno por el ataque terrorista en el Vraem.
Sería bueno que los fujimoristas mantengan la calma al momento de emitir opiniones y declaraciones sobre diversos temas. La campaña todavía no termina, falta la segunda votación a realizarse el próximo 5 de junio y queda mucho pan por rebanar.
De manera que no se dejen llevar por la emoción de haber alcanzado la mayoría absoluta en el Congreso, porque Keiko Fujimori aún no es Presidenta del Perú. Faltan 50 días para el balotaje y cualquier cosa puede pasar. Prudencia y humildad, señores fujimoristas. Su candidata ha prometido un gobierno distinto y los peruanos no queremos que la historia se repita. Hasta mañana, amigos de La Primera.
