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María Elena Llanos, quien fuera amiga de Nadine Heredia hasta hace un par de años, reveló que su apoyo a las investigaciones por lavado de activos coincide con trabas en su proceso judicial de custodia a su menor hija, y que teme que esto sea una venganza del gobierno.
En entrevista al portal “Pueblo y Sociedad Noticias”, la testigo explicó cómo entregó al Ministerio Público hojas perdidas de las agendas de la primera dama, donde se registran movimientos de dinero por millones de dólares que habrían llegado desde Venezuela y Brasil.
“Esas hojas me llegaron en un sobre antes de que estallara lo de (Martín) Belaunde Lossio. Cuando me citó esa comisión investigadora del Congreso, me citó por facturas, no me preguntaron de Brasil ni de cuentas en Panamá. Recién luego el Ministerio Público empieza a investigar lo de las agendas y las entrego”, señaló.
Agregó que, luego de eso, empezaron más problemas en su litigio. “Hace meses me detuvieron cuando ya iba a ir a declarar al fiscal por problemas sobre la tenencia de mi hija. Por esto temo represalias del gobierno, porque todo lo que sé lo digo a las autoridades, y termino con estas cosas raras”, dijo.
Llanos reiteró que ha vivido al costado del poder, y no le cree nada a Ollanta Humala cuando él señala que ordenaba escribir en las agendas, porque es ilógico que el entonces presidente del Partido Nacionalista se asigne 800 soles mensuales para sus gastos, entre los años 2006 y 2011.
“Cada vez que yo iba a denunciar algo, me pasaba un problema con mi hija. Nadine ha ampliado para mí su sed de venganza y actúa mediante mi hija. Todo empezó porque le pido que envíen al procurador por una resolución ilegal de (Wilfredo) Pedraza con Migraciones, que le permitió irse del país sin mí. De allí viene el abuso desde el Poder Judicial”, reclamó.
Acotó que algunos magistrados se dejan presionar, y recordó la frase “juez se puede escoger” en una agenda.
