Sala Plena, en sesión extraordinaria, llama al diálogo y exige prudencia y proporcionalidad de las autoridades para garantizar seguridad ciudadana sin afectar libertades de reunión y expresión.

¿Quién? La Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia. ¿Qué? Emitió un pronunciamiento que exhorta a preservar la separación y colaboración de poderes, la legalidad y el pluralismo; además, pidió proteger el derecho a la protesta y contener actos violentos. ¿Cuándo? En sesión extraordinaria realizada hoy. ¿Dónde? Lima, Perú. ¿Por qué? Por la coyuntura de conflictividad social y política. ¿Cómo? A través de un comunicado institucional que también convoca al diálogo entre autoridades y ciudadanía.
Antecedentes y contexto
El pronunciamiento ocurre en un escenario de tensiones políticas y protestas a escala nacional. La Corte Suprema —máximo órgano de deliberación del Poder Judicial— recordó que los principios “pétreos” de la democracia (separación y colaboración de poderes, respeto a la legalidad y al pluralismo) son innegociables en un Estado constitucional.
Declaraciones y posturas de actores relevantes
- Derecho a la protesta. La Sala Plena reafirmó que la protesta es un derecho fundamental que debe ejercerse de manera pacífica y con respeto a otros derechos (vida, integridad, dignidad y propiedad pública y privada). Requirió a las autoridades actuar con prudencia y proporcionalidad.
- Seguridad ciudadana. Indicó que la tutela de la seguridad demanda compromiso estatal y respeto a los derechos de la población. Exhortó a evitar atentados contra manifestantes pacíficos y a contener con eficacia a quienes vulneren las reglas de una protesta sin violencia.
- Diálogo y rechazo al autoritarismo. Llamó a autoridades y ciudadanía a mantener vocación de diálogo y a no aceptar propuestas o actitudes que encaminen al autoritarismo o sistemas contrarios al bien común.
- Independencia judicial. Subrayó que la potestad jurisdiccional es clave del orden constitucional y que la independencia judicial garantiza el respeto a la ley y la tutela de derechos.
- Violencia contra operadores de justicia. Alertó que el índice de homicidios en el país también ha afectado al Poder Judicial, con el asesinato de dos jueces de paz en sus despachos.
Cifras, documentos y datos oficiales
- Hecho notorio: sesión extraordinaria de la Sala Plena y comunicado institucional difundido hoy.
- Referencias clave del pronunciamiento: separación y colaboración de poderes; legalidad; pluralismo; proporcionalidad en el uso de la fuerza; independencia judicial.
- Hechos asociados: mención expresa a dos jueces de paz asesinados en sus oficinas, como parte del contexto de inseguridad.
Implicancias políticas, sociales y económicas
- Institucionalidad democrática. El llamado de la Corte puede funcionar como parámetro para la actuación de los poderes Ejecutivo y Legislativo y para los gobiernos regionales y locales en materia de respeto a competencias y control de convencionalidad.
- Gestión del orden público. Reafirma estándares de uso proporcional de la fuerza y podría orientar protocolos policiales y fiscales en manifestaciones.
- Clima social y económico. Un marco de diálogo y previsibilidad institucional reduce riesgos de escalamiento del conflicto, condición relevante para la actividad económica y la inversión pública.
Próximas acciones, escenarios o consecuencias posibles
- Difusión y aplicación del pronunciamiento en directivas internas del Poder Judicial y coordinación interinstitucional.
- Ajustes de protocolos de orden público con enfoque de derechos humanos (policía, fiscalía, defensoría).
- Mesas de diálogo entre Ejecutivo, Congreso, gobiernos subnacionales y sociedad civil para canalizar demandas y prevenir violencia.
- Seguimiento de casos de agresiones y homicidios contra operadores de justicia, con medidas de protección y celeridad procesal.
Panorama
La Corte Suprema fijó una posición institucional que combina defensa del Estado de derecho, resguardo del derecho a la protesta y llamado al diálogo. En un contexto de tensión y violencia, el Poder Judicial demanda prudencia, proporcionalidad e independencia como condiciones esenciales para superar la crisis sin desbordes ni retrocesos democráticos.