La noche prometía esperanza para Sporting Cristal. Jugaba en casa, venía de una victoria contundente en la liga local, y se enfrentaba a un rival directo en el Grupo G de la Copa Libertadores.
Pero al final del partido, el marcador fue lapidario: 0-1 ante Cerro Porteño, y con él, la clasificación a octavos quedó prácticamente fuera de alcance. Sin embargo, lo más duro no vino del resultado, sino de la autopsia emocional y táctica que hizo su técnico, Paulo Autuori, en conferencia de prensa.

Primer tiempo perdido, segundo tiempo sin premio
Sporting Cristal arrancó desconectado. El primer tiempo fue plano, lento y sin ideas. Cerro Porteño, sin ser avasallador, capitalizó su única ocasión clara con un gol quirúrgico que descolocó al equipo y al estadio.
“Tuvimos un equipo que tuvo temor de jugar en la primera parte. No hicimos lo que debimos.”, fue la primera frase del técnico brasileño, que no tuvo reparos en dejar en evidencia a su plantel.
El análisis fue descarnado. Autuori no señaló fallas arbitrales ni apeló a la mala fortuna. Apuntó directamente a la psicología competitiva de su equipo:
“Cuando el equipo tiene dificultades, vuelve a sus viejos hábitos: el pelotazo, el centro improvisado. Eso no es lo que entrenamos.”
Una derrota mental más que táctica
El entrenador fue claro: la falta de juego no fue tanto por incapacidad técnica, sino por bloqueo emocional y presión mal gestionada.
“El fútbol no es solo físico y técnico, también es mental. Y este es el aspecto que más debemos trabajar.”, insistió Autuori. Su lectura evidencia que el problema es estructural: un equipo que aún no asimila la presión de instancias internacionales.
A pesar de una notoria mejoría en el complemento —con Cristal dominando campo rival y generando peligro— el equipo no tuvo la contundencia ni la lucidez necesaria para remontar. El ingreso de Leandro Sosa y los desbordes de Lora fueron intentos, pero no soluciones.
El grupo G, el reloj y el milagro
La derrota deja a Sporting Cristal con 5 puntos, detrás de Palmeiras (12) y Cerro Porteño (7). El cuadro rimense aún debe visitar a Palmeiras en São Paulo. La única posibilidad de avanzar es vencer a los brasileños y esperar que Cerro no sume ante Universitario. Un escenario que, en términos futbolísticos y anímicos, roza lo milagroso.
Posición | Equipo | Puntos | Diferencia de gol |
---|---|---|---|
1º | Palmeiras | 12 | +8 |
2º | Cerro Porteño | 7 | +1 |
3º | Sporting Cristal | 5 | 0 |
4º | Universitario | 1 | -9 |
Más allá de la clasificación, la urgencia pasa por el fondo emocional y la convicción. Autuori fue enfático:
“No podemos entrar con prisa ni dejarnos dominar por la presión del público. Si queremos competir a este nivel, debemos jugar sin miedo.”
Lo que viene: ADT, Palmeiras y el veredicto final
Cristal enfrentará este sábado a ADT por Liga 1. Será una ocasión para recomponer el ánimo y evaluar posibles cambios en la alineación. Luego viajará a Brasil para un cierre de fase de grupos que, más allá de lo que dicte la tabla, servirá como termómetro del carácter del equipo.
Reflexión final: el silencio del Nacional y la voz del técnico
La noche terminó con una mezcla de silencio y resignación en el Nacional. El hincha, que esperó una noche de fiesta, se fue masticando bronca. Y Autuori, lejos de encubrir lo ocurrido, hizo lo que pocos entrenadores hacen en una derrota: nombrar el miedo, el peso del pasado, y la urgencia de transformarse.
“Queremos un equipo que juegue, que proponga, no que se esconda en el centro desesperado.”
Esa frase fue más que una crítica: fue una advertencia. A partir de ahora, cada minuto que juegue Cristal será un examen de identidad. Y el tiempo se agota.