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La búsqueda de un departamento propio en Lima es una experiencia que combina esperanza con incertidumbre. Para muchos limeños, dar el paso hacia la propiedad representa una de las decisiones más importantes de sus vidas, pero también una de las más complejas.
Entre elegir la ubicación ideal y navegar un proceso cargado de implicancias financieras y legales, el camino a la vivienda propia puede resultar abrumador sin la información y el acompañamiento adecuados.
Según Cinthia Pasache, gerente comercial de Best Place to Live®, “tener muchas opciones no siempre es una ventaja si no se dispone de las herramientas para evaluar y comparar correctamente. El exceso de información sin una guía clara puede acabar generando más dudas que certezas”. Este comentario resume una realidad en la que la gran oferta inmobiliaria en Lima—que ha crecido notablemente, según datos de la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI) en un 30%—se enfrenta al reto de hacer valer la calidad sobre la cantidad.
Obstáculos que enfrenta el comprador
Uno de los principales desafíos es el acceso a los créditos hipotecarios. Aunque productos como el crédito Mivivienda o diversas alternativas de financiamiento existen, muchos potenciales compradores se ven frenados por restricciones rigurosas relacionadas con ingresos, historial crediticio o la exigencia de una cuota inicial elevada. Esta limitación impide que una gran cantidad de personas logren cumplir su sueño de tener una casa propia.
Otro reto importante es la abrumadora cantidad de opciones disponibles en el mercado. La diversidad de proyectos inmobiliarios, con características muy similares, dificulta que el comprador pueda diferenciar entre propuestas de valor real. En este contexto, la falta de educación financiera e inmobiliaria juega un papel decisivo, ya que muchos no conocen los pasos del proceso de adquisición ni comprenden los costos adicionales—como notaría, registros públicos e impuestos—o los riesgos de invertir en proyectos sin certificación y respaldo técnico.
Herramientas y soluciones para el comprador
Para contrarrestar estas barreras, expertos recomiendan contar con herramientas y estrategias que faciliten la toma de decisiones:
- Ferias inmobiliarias: Estos espacios reúnen proyectos de distintas entidades financieras, asesores técnicos y desarrolladores en un solo lugar. La próxima Expourbania, programada del 16 al 18 de mayo, promete ser una oportunidad ideal para comparar alternativas de vivienda de manera inmediata y con asesoría personalizada.
- Certificaciones de calidad: Investigar sobre la reputación de los proyectos, revisar opiniones de clientes y asegurarse de que los desarrollos cuenten con certificaciones de calidad es fundamental para disminuir riesgos asociados a la inversión.
- Herramientas digitales: Plataformas como Urbania, Properati y el portal del Fondo Mivivienda permiten comparar distritos, precios por metro cuadrado, simular créditos y verificar la legalidad de los proyectos. Adicionalmente, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) ofrece una Guía de productos y servicios inmobiliarios y, junto con el portal “Mira a quién le compras”, facilita conocer sanciones y multas impuestas a empresas del sector.
“Una compra informada no solo reduce los riesgos, sino que también fortalece la confianza del comprador en el mercado”, destaca Pasache. Para ella, las ferias, las certificaciones y las plataformas digitales son aliados clave que permiten a los potenciales propietarios sortear los desafíos que plantea la búsqueda de una vivienda en Lima.
Un panorama en constante transformación
El mercado inmobiliario limeño sigue evolucionando, y la gran oferta de departamentos se suma a la necesidad de contar con una educación financiera que permita discernir entre opciones de verdadera calidad y propuestas que, a la larga, pueden convertirse en dolorosas sorpresas. A medida que el sector crece, también debe hacerlo la capacidad de los compradores para tomar decisiones fundamentadas, entendiendo que cada inversión en vivienda es, de por sí, un paso importante hacia la estabilidad económica y familiar.
En este contexto, el impulso de las herramientas digitales y las ferias inmobiliarias marcan el camino para transformar lo que puede ser un proceso complicado en una experiencia de aprendizaje y empoderamiento para el ciudadano.
Mientras la desinformación sigue siendo un obstáculo, la apuesta por una mayor transparencia y educación en el ámbito financiero e inmobiliario se confabula como la solución para lograr que el sueño de tener un hogar en Lima sea alcanzable y, sobre todo, sustentable a largo plazo.
