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Lanzar prematuramente su candidatura presidencial le costó caro a Rafael López Aliaga. Eso fue la gota que resbalsó el vaso de la paciencia de los ahora excongresistas de Renovación Popular Jorge Montoya, José Cueto y Javier Padilla, quienes renunciaron a la bancada, pero no al partido político.
De inmediato, Porky lanzó un comunicado público para que se vayan totalmente, diciendo que no respetaban los fueros políticos. Además, otros celestes como Alejandro Muñante tildaron a los marinos de ser prácticamente unos engreídos incapaces de coordinar proyectos, y pretender manejarse como si aún estuvieran en un cuartel.
