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Brigadistas de salud de Lambayeque orientaron a los pobladores que visitaron los cementerios sobre la importancia de prevenir el dengue y evitar el uso de recipientes con agua que pueden convertirse en criaderos del zancudo transmisor.
Con el objetivo de reducir los criaderos del mosquito Aedes Aegypti, transmisor del dengue y otras enfermedades, brigadistas de la Gerencia Regional de Salud (Geresa) de Lambayeque intensifican las acciones de prevención para evitar la propagación de la enfermedad. En el marco del Día de Todos los Santos, esta mañana se desarrollaron actividades de sensibilización en los cementerios de la región, promoviendo el uso de arena húmeda en los floreros. «Respetamos las tradiciones de nuestras familias lambayecanas, pero queremos presentarles una alternativa que nos ayudará a prevenir la propagación del dengue y proteger a nuestra población», afirmó el gerente regional de Salud, Yonny Ureta Núñez. El funcionario destacó, además, que los equipos de salud están presentes en los cementerios, instando a los visitantes a no ingresar con botellas o recipientes con agua que puedan convertirse en criaderos de mosquitos. Como parte de estas actividades, se distribuyeron materiales educativos para informar a la población sobre las medidas preventivas contra el dengue. «Nuestro objetivo es que la comunidad tenga acceso a información veraz y actualizada, evitando la desinformación», agregó Ureta. Hasta la fecha, Lambayeque ha reportado 9,688 casos de dengue y lamentablemente 32 fallecimientos, el último de ellos registrado hace un mes, correspondiente a un paciente con dengue aparentemente leve que se complicó debido a una comorbilidad. «En la última semana epidemiológica, hemos tenido solo 9 casos de dengue leve. En comparación con el año pasado, cuando a estas alturas ya teníamos 30,600 casos, hemos logrado una reducción significativa», comentó la autoridad de Salud en Lambayeque, atribuyendo este descenso a las acciones preventivas y educativas implementadas en toda la región.
La Geresa Lambayeque ha contratado a 180 personas para formar brigadas de fumigación y educación, que están trabajando intensamente en zonas urbanas, donde se han registrado la mayoría de los casos, a diferencia de las zonas rurales, que han demostrado mayor conciencia en la prevención. «Estamos realizando visitas casa por casa para educar a las familias, identificando floreros y eliminando cualquier objeto que pueda servir como criadero para el mosquito. No permitiremos que el dengue nos venza», enfatizó el gerente regional de salud. Ureta Núñez subrayó que la fumigación es solo una parte de la estrategia y su efecto es temporal. «La fumigación no elimina los huevecillos ni las larvas del mosquito, solo a los adultos. Por ello, es fundamental que las familias comprendan la importancia de no tener reservorios de agua estancada y de eliminar todos los posibles criaderos», concluyó.
