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Luis Segura dijo que no renunciará al cargo de presidente.
El presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Luis Segura, confirmó el martes que la selección albiceleste jugará la Copa América Centenario en Estados Unidos, luego de rumores contrarios surgidos tras la intervención judicial que sufrió la entidad, que está envuelta en un caos institucional.
El lunes, la juez María Servini de Cubría ordenó la intervención por tres meses de dos veedores -un abogado y una contadora- para investigar presuntas irregularidades en el manejo y reparto de los fondos de los derechos de televisación.
También ordenó suspender las elecciones a presidente, que debían realizarse el 30 de junio, luego del escándalo provocado por los fallidos comicios de diciembre pasado, en medio de fuertes disputas de poder. La intervención de la Inspección General de Justicia (IGJ) provocó la reacción de algunos dirigentes, que dijeron que podrían retirar a la selección de la Copa América.
"No hay ninguna posibilidad de que la selección vuelva de Estados Unidos. No hay ninguna posibilidad de que se corte el fútbol", dijo Segura en una conferencia de prensa en la que también afirmó que no renunciará al cargo que heredó de Julio Humberto Grondona.
El ex presidente era un poderoso dirigente con fuerte peso en la FIFA, lo que le permitía alinear a todos los clubes detrás de su liderazgo. Tras su muerte en 2014, las encarnizadas peleas por la sucesión y los negocios del fútbol llevaron a una creciente desorganización del fútbol argentino.
El descontrol en la AFA es seguido de cerca por el Gobierno del presidente Mauricio Macri, ya que el fútbol es el deporte más popular del país y los derechos de televisación son pagados por el Estado. Por eso, algunos dirigentes de fútbol temen que el Gobierno busque controlar la AFA.
"Espero que esto no sea el inicio de una intervención del Gobierno. Estamos en problemas si la IGJ interviene a cada institución con problemas económicos. Esto no beneficia a AFA", dijo Segura.
Por su parte, Claudio "Chiqui" Tapia, presidente de Barracas Central de la segunda división y que está dispuesto a pelear por la presidencia de la AFA, espera que la intervención no genere problemas con la FIFA, que no ve con buenos ojos la injerencia de la justicia ordinaria en sus asuntos.
