En la audiencia de impedimento de salida del país contra el ministro del Interior, testigos protegidos del Ministerio Público presentaron conversaciones de WhatsApp como parte de las evidencias.

Ministro Santiváñez acusado de haber ofrecido sobornos para fallos a favor de sus clientes.
El ministro del Interior, Juan José Santiváñez, ha sido acusado de haber cobrado al menos 20 mil dólares para influir sobre las decisiones tanto del Tribunal Constitucional como del INPE y el Ministerio de Justicia a favor de sus clientes, según declaraciones de los testigos protegidos quienes presentaron mensajes de WhatsApp este viernes 14 de marzo ante la Fiscalía en la audiencia de impedimento de salida del país por 18 meses contra el titular.
El fiscal a cargo, Luis Alberto Ballón, sostiene que se cuenta con más de mil mensajes de WhatsApp, 77 audios y 34 imágenes y archivos PDF que el ministro Santiváñez habría sostenido con una persona relacionada al interno Miguel Marcelo Salirrosas. En dicha información se leería cómo coordinan el cobro de 20 mil dólares por los favores en beneficio de los clientes.
Esas negociaciones datan hasta el pasado 5 de enero de 2024 cuando el ministro del Interior asumió la defensa legal de dos policías vinculados a la organización criminal de ‘Los Pulpos’ de la ciudad de Trujillo y afirmaba que sabía como el Tribunal Constitucional estaba manejando el caso de uno de los policías acusados llamado Eber Riquelme Juárez.
Según lo presentado, el 8 de enero le dijo a su supuesto cliente que lo que cobraba era 20 mil soles pero que necesitaba 20 mil dólares extra por el concepto de asesores externos. De acuerdo con el testigo protegido 01-2025, el titular decía que con esa cantidad de dinero él «aseguraba el tema» y era garantía de que el recurso presentado en favor de Miguel Salirrosas, el otro policía relacionado al caso, se declare fundado por el Ministerio Público. Además habría dicho que no se preocupara porque tenía contactos en la Segunda Sala del TC.
Juan José Santiváñez: Fiscalía verificó depósitos de dinero
El Ministerio Público pudo corroborar que, en las conversaciones, hay dos depósitos de dinero en tres partes, del 18 de enero y 19 de enero, en montos de 10 mil, 9,700 y 300 dólares, según lo declarado por el segundo testigo protegido y que luego de ese pago, el ministro dio a conocer a sus clientes que las causas que estaban en el Tribunal Constitucional se habían agendado con prioridad para el día 7de febrero de 2024.
Pero, después de la audiencia el 26 de febrero, el titular Santiváñez se disculpó con el cliente porque había tomado conocimiento de que el magistrado Helder Rodríguez Haro, no votaría a su favor. Pese a esto, se comprometió a revertir la decisión en contra porque dos magistrados de la institución estaban de su lado. «Nosotros estamos trabajando para que no sea así. En este caso esto ha ocurrido así porque el ponente lamentablemente se cerró y es un antipolicías. Nosotros tenemos a dos magistrados del TC que nos están apoyando. Los magistrados ahí, sobre todo por ejemplo el Dr. (Gustavo Gutiérrez) Ticse que dice que no puede ser tantos años”. «Diario El Comercio. Todos los derechos reservados.», habría dicho el ministro en un audio que el testigo 02 entregó a la Fiscalía.
A pesar de estas supuestas intervenciones, el 7 de marzo de 2024 se rechazó el recurso de agravio constitucional y, posteriormente, en mayo, también se declaró infundado el recurso de aclaración.
Las negociaciones continuaron hasta el 9 de septiembre de 2024, cuando Santiváñez ya ejercía como ministro. Según el testimonio de un testigo protegido, este logró registrar en audio una reunión en la oficina del ministro, en la que él afirmaba que ahora tenía más oportunidades debido a su cargo, ya que contaba con más contactos dentro del Tribunal Constitucional. Como ejemplo, mencionó a una mujer dentro de esta institución, aunque no recordó su nombre, pero aseguró que aparecía en la grabación.
El testigo también declaró ante la fiscalía que el ministro mencionó haberle hecho un favor a esta persona, similar al de una escolta, y que, por ello, no debía preocuparse, ya que «favor con favor se paga».