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Resulta que Martín Vizcarra se había ido a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, para decir que es un perseguido político, y por eso se le ha inhabilitado para ejercer cargo público. Como le dijeron que primero tiene que agotar el fuero interno, sus fracasadas demandas de amparo contra el Congreso ahora las llevó hasta el Tribunal Constitucional, donde seguramente también lo rechazarán. ¿Le alcanzará el tiempo para postular el 2026?
