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El secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Pietro Parolin, se reunió hoy sábado en el Vaticano con el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance.
Abordaron temas como la migración, los conflictos internacionales y la situación de comunidades perseguidas, en un contexto marcado por recientes críticas del papa Francisco a la política migratoria del presidente Donald Trump.
Durante el encuentro, calificado como “cordial”, también participó monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las relaciones con los Estados. Según un comunicado del Vaticano, se trató “la situación internacional, en particular en los países marcados por la guerra, las tensiones políticas y crisis humanitarias, con especial atención a los migrantes, refugiados y prisioneros”.
La Casa Blanca informó que ambas partes conversaron sobre la fe religiosa compartida, el papel del catolicismo en Estados Unidos y el compromiso del presidente Trump con la libertad religiosa y la paz mundial. Vance, católico converso, también expresó su preocupación por la situación de las comunidades cristianas perseguidas en diversas regiones del mundo.
Aunque se especuló con un posible encuentro entre Vance y el papa Francisco, de 88 años y convaleciente de una neumonía, no se confirmó una reunión formal. No obstante, el pontífice fue visto el sábado por la tarde saludando a los fieles desde una silla de ruedas en la basílica de San Pedro, según imágenes difundidas por la prensa.
La visita de Vance se produce dos meses después de que el papa criticara las expulsiones masivas de migrantes impulsadas por la administración Trump, lo que generó tensiones con la Casa Blanca. En 2024, el sumo pontífice calificó de “locura” la hostilidad hacia los migrantes en EE. UU. y cuestionó la postura de algunos sectores católicos conservadores del país.
Vance, cercano a este sector crítico del pontífice argentino, llegó el viernes a Roma para participar del fin de semana de Pascua. Junto a su esposa y sus tres hijos, asistió a la misa de la Pasión del Viernes Santo en la basílica de San Pedro, y también sostuvo una reunión con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
