HECHOS Y NO ESPERANZAS FALSAS 

0
7

La presidenta Dina Boluarte dijo, muy suelta de huesos, en una de sus últimas presentaciones públicas, que su gobierno es de “hechos y no de esperanzas falsas”. Esto fue durante la inauguración de los laboratorios del “Sistema Integrado de Identificación Balística – IBIS Integrado” en Surquillo, la mandataria también remarcó que su régimen viene trabajando contra la inseguridad ciudadana.  

En esta actividad pública, en la que estuvo acompañada de nada menos que del ministro del Interior, Juan José Santiváñez, Boluarte tuvo el desparpajo de volver a pedir a los jueces y fiscales no liberar delincuentes, pese a que lleva más de 20 días sin promulgar la ley que restablece la detención preliminar. Olvidando que su gobierno mantiene prófugo a Vladimir Cerrón por más de 420 días y a su hermano Nicanor Boluarte, más de 45 días, por mencionar a dos de sus más cercanos allegados, sin contar una larga relación de ex ministros del gobierno del recluido ex presidente Pedro Castillo, que gozan de libertad estando en la lista de requisitoriados por la policía y los órganos de justicia. 

En verdad más de una autoridad del Poder Judicial y el Ministerio Público se habrá resbalado de su silla producto de la indignación al escuchar parte de su discurso en el que señala que:  “La Policía hace su trabajo, hace el esfuerzo, los capturan y los ponen a disposición de ustedes, señores jueces y fiscales, para que se cumpla la ley y los criminales estén en las cárceles y no vuelvan nuevamente a las calles para cometer los crímenes que sufre nuestra ciudadanía”, es impresionante el grado de negación y el ínfimo sentido de la realidad que intenta proyectar la inquilina de palacio de Pizarro. 

Parece estar claro, que la orden de la presidenta es no capturar a Cerrón ni a su hermano Nicanor, al menos mientras ella esté en el poder, los hechos y el tiempo así lo señalan. Ella misma con su actitud enredadora y cuasi obstruccionista para con sus casos de denuncias e investigaciones, da un pésimo ejemplo del irrespeto hacia el sistema de justicia. Da la impresión que pese al tiempo transcurrido en el cargo no ha captado la real magnitud e importancia que tiene el comportamiento presidencial hacia el sistema político y las obligaciones ciudadanas que ello embarga. 

Diera la impresión que viene administrando el cargo como que si la Presidencia de la República se tratara de una prefectura provincial y remota, en algún lugar desolado del país, donde se le saca la vuelta a las leyes y se le favorece a los allegados impunemente. Ella sin darse cuenta está cavando cada vez más profundo su propia tumba política. Mal aconsejada o acorralada por las consecuencias de sus actos, está optando por barrer sus faltas y esconderlas bajo la alfombra, sin pensar que tarde o temprano los plazos se cumplen y se tendrán que hacer una limpieza general. Cuando ese momento llegue no habrá forma de evadir su responsabilidad, enfrentar a la justicia y asumir el resultado de las investigaciones, los cargos, las sentencias así como cumplir condenas. Cuando ese momento llegue, enfrentar a la justicia será un hecho y no habrá esperanzas de impunidad. Tiempo al tiempo. Seguiremos alerta. Hasta la próxima semana mis amigos de Primera. 

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here