Los cinco días que el tumbesino Manuel Merino de Lama tuvo como jefe de Estado- del 10 al 15 de noviembre del 2020- han empezado a pasarle factura, pero multiplicada por mil. Por lo pronto, la Fiscalía de la Nación dispuso iniciar diligencias preliminares por ocho meses en su contra por una retahíla de presuntos delitos que van desde abuso de autoridad hasta homicidio doloso en agravio de Jack Pintado e Inti Sotelo. Y cómo si esto fuera poco, se agrega la supuesta desaparición forzada en agravio de personas por identificar. Una mala inversión, sin duda.