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Un aspirante a colaborador eficaz (N° 10-2018) ha declarado ante el fiscal Germán Juárez, miembro del Equipo Especial Lava Jato, que la empresa Obrainsa, investigada por el ‘Club de la Construcción’, y su socia Astaldi, de capital italiano, hicieron un pago ilícito de S/1’000.000 al hoy presidente de la República, Martín Vizcarra.
Según el testimonio al que accedió El Comercio, el testigo dijo que el desembolso (2 % del total del proyecto) fue a cambio de que se le otorgue la buena pro de la obra de infraestructura de riego Lomas de Ilo, cuando Vizcarra Cornejo era gobernador regional de Moquegua. Vale anotar que el proceso de licitación fue convocado por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops, por sus siglas en inglés) por encargo del Proyecto Especial Pasto Grande del Gobierno Regional de Moquegua.
En la declaración que brindó el aspirante la semana pasada al fiscal Juárez, este sostuvo que el desembolso se hizo en efectivo en dos armadas (400 mil y 600 mil soles), a través de cheques girados a nombre del conserje de la constructora, y que hubo reuniones previas con entre Elard Tejeda Moscoso -propietario de Obrainsa- y el ahora jefe del Estado, en las oficinas de Obrainsa ubicadas en San Isidro.
El informante detalló que Martín Vizcarra ayudó a Tejeda indicándole que para adjudicarles el contrato era «indispensable que presenten una nueva propuesta que no debía exceder los S/81’000.000», ya que el consorcio Obrainsa-Astaldi había presentado una propuesta económica de S/86’454.818,06.
«Esa reunión se realizó en las oficinas de Obrainsa entre los días 4 o 5 de noviembre de 2013 en horas de la tarde. La secretaria de la gerencia de Obrainsa, Carmen Ríos Quintana, recibió al señor Martin Vizcarra y lo invitó a pasar al directorio», narró el aspirante.
Agregó que en ese encuentro el mandatario requirió el pago «por el apoyo otorgado», «aduciendo que necesitaba fondos personales para atender gastos en relación a su cargo y que tenía conocimiento de que, en las obras que licitaba Provías Nacional, todas las empresas que ganaban pagaban una comisión de más del 2% del costo directo de la obra a los funcionarios públicos».
Adicionalmente, precisó que, culminada la reunión entre Vizcarra Cornejo y Tejeda Moscoso, este último llamó a su socio Giacomo Orsatti, de Astaldi, para informarle sobre el encuentro y el pago solicitado por el entonces gobernador de Moquegua a cambio de la buena pro de Lomas de Ilo.
El 20 de enero del 2014, cuando el consorcio ya había iniciado los trabajos en Lomas de Ilo y recibido el primer adelanto, el hoy presidente «llamó al celular o al teléfono privado de la oficina de Tejeda para solicitarle que lo atendiera con lo acordado y que tenía necesidad de hacer unos pagos». Es así que, finalmente, se concretan los dos pagos en efectivo por 400 y 600 mil soles entregados en sobres manilas, luego de que el conserje de Obrainsa, Tobias Puerta Gutiérrez, retirara el dinero de los cheques emitidos por la constructora a su nombre.
En total, a Vizcarra, afirmó el colaborador, se le entregó S/1’000.000 en efectivo más S/35.985,65 cancelados a la empresa ATSA por el alquiler de una avioneta. Y es que, en el año 2013, el hoy jefe de Estado le habría pedido a Elard Tejeda que realice el alquiler de la aeronave «a cuenta de lo pactado» para que un grupo de altos funcionarios del Gobierno del exmandatario boliviano Evo Morales viajen de Lima a Tacna o Ilo para reunirse con él.
No obstante, a través de la oficina de prensa de Palacio de Gobierno, el jefe de Estado “negó rotundamente” lo que ha declarado el aspirante a colaborador eficaz y respondió que es “absolutamente falso”. “Siguen manchando honras”, señaló para El Comercio.
Mónica Moreno, jefa de prensa de Palacio de Gobierno, indicó que el dignatario “se acuerda mucho de la época y de las cosas que pasaron”. “Esa obra la convocó y adjudicó Unops”, resaltó.
