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“No sabemos cuántas (víctimas) van a ser, seguimos buscando. Lo primero que quiero decir es que mi corazón, nuestros corazones, los corazones de todos los colombianos están con las víctimas de esta tragedia”, fueron las últimas declaraciones brindadas por el presidente Juan Manuel Santos, tras la tragedia en Mocoa.
En su último balance, la Cruz Roja Colombiana informó que había 234 fallecidos, 202, heridos, 220 desaparecidos, 300 familias afectadas, 17 barrios impactados por la avalancha y 25 viviendas totalmente destruidas.
“¿Qué sucedió? La noche del viernes se inició una intensa lluvia, que los especialistas indican que cayó 130 milímetros de agua, cuando usualmente en un mes llueve en la zona 400 milímetros, ¿qué quiere decir esto? Que 30% de la lluvia de un mes se produjo entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, y eso precipitó una creciente súbita de varios ríos, el río Mocoa, Mulato, Sanguyaco y las quebradas aledañas y eso produjo una avalancha”, dijo un representante de la Cruz Roja.
“¿Qué vamos hacer ahora? Vamos a declarar con la gobernadora estado de calamidad para poder atender de la mejor forma posible esta situación vamos hacer un plan de acción”, sostuvo el jefe de Estado colombiano.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente dijo que “toda la capacidad del Estado está desplegada para apoyar labor humanitaria y de búsqueda de rescate”.
El gobierno colombiano activó el Sistema Nacional de Atención de Desastres para atender la emergencia. La presidencia informó en un comunicado que en primera instancia fue desplazado un avión militar con personal técnico, ayuda humanitaria, kits de aseo, cocinas y frazadas, entre otros.
El Grupo de la Policía Nacional Especializado en Emergencias y Desastres también envió personal técnico y apoyará las labores de asistencia médica a los damnificados, dijo la presidencia.
