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Miguel Yamazaki, jefe del Cenepred, consideró que hemos olvidado de que somos un país multipeligro
Miguel Yamazaki, jefe del Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred), alertó a la población que cuando las autoridades hablan sobre la ocurrencia de un Fenómeno El Niño moderado para el Perú no significa que estamos libres de riesgos o desastres o que eso implique dejar de estar preparados ante lo que podría venir.
“Moderado no significa que no va a pasar nada. Moderado es más o menos lo que nos ha pasado el verano del presente año. De repente hay una percepción equivocada del término (…) Moderado implica la misma cantidad de lluvia que tuvimos el año pasado (y que causó diversos desastres)”, detalló el experto.
Para el experto son muchos los cambios que experimenta el clima de Lima y que son consecuencia del Fenómeno El Niño, ya sea costero o global.
¿Las lloviznas son por el Fenómeno El Niño?
“Este periodo de lloviznas soportadas por los limeños en las últimas semanas son a causa del enfriamiento repentino del mar, que es temporal. El mar ha reducido un poco su temperatura, pero la temperatura superficial del mar, a lo largo de toda la costa, sigue por encima de sus valores normales en 2 o 3 grados. Entonces El Niño costero sigue vigente en estos momentos”.
Yamazaki indicó que el más reciente comunicado del Enfen, del 14 de setiembre, informó que “el Fenómeno El Niño Costero va a continuar en el verano del 2024 y que El Niño Global, que ocurre en el Pacífico Central, está provocando que la temperatura se incremente en forma alarmante”.
El impacto de ambos fenómenos tiene consecuencias directas sobre las lluvias, necesarias para la agricultura, así como para el aseguramiento de agua dulce para la población.
“De consolidarse ese escenario, El Niño global va a darse este verano y eso tiene incidencia directa sobre la sequía que tenemos desde el año pasado, con un déficit hídrico en el país. Se está configurando para el próximo año un escenario de lluvias intensas por encima de sus valores normales, mientras que en el sur habrá sequías extremas”, adelantó.
País multipeligro
El experto lamentó que la población deje de lado que somos un país geográficamente diverso, con eventos climatológicos variados, que nos obliga a estar preparados ante diferentes escenarios.
“Tenemos un país multipeligro. No solo tenemos lluvias, tenemos inundaciones, tenemos un volcán como el Ubinas que cada cierto tiempo nos recuerda que está activo; incendios forestales y otras cosas más. Hay que tener diversas estrategias para responder ante estos fenómenos”, comentó.
El riesgo al que está expuesto cada uno de los pobladores tiene características diferenciadas de acuerdo con el lugar donde se vive.
“Si vivo cerca a un río debo ser consciente del riesgo que representa o frente a una quebrada. Ver qué riesgos tengo frente a un sismo, sobre todo si vivo en una vivienda precaria, autoconstruida o frente a un cerro, por lo menos debo tener consciencia del peligro al que estoy expuesto”.
Destacó que los trabajos de prevención demandan mucho tiempo y lamentablemente ese tipo de inversiones y obras no se hacen con la debida anticipación.
“El trabajo de descolmatación debería hacerse todo el tiempo como parte de la labor de los gobiernos locales porque les asigna presupuesto y no esperar a tener pronósticos de lluvias para hacer algo. Los puntos críticos ya están identificados. Después que pase el periodo de lluvias deberíamos comenzar a trabajar para estar preparados cuando llegue el próximo Niño, porque llegará nuevamente en 3 a 4 años”.
