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El Poder Judicial reanudó las audiencias del juicio oral sobre el caso Ecoteva, por el cual diversos allegados al expresidente Alejandro Toledo enfrentan cargos de lavado de activos.
En esta fase del proceso la participación del exmandatario se encuentra suspendida hasta que se de un pronunciamiento de parte del gobierno de Estados Unidos respecto al pedido de extradición cursado por Perú por este tema.
Debe recordarse que el exmandatario se encuentra en el país gracias al acuerdo de extradición entre Perú y el país norteamericano. Esta solicitud hacía mención exclusivamente al caso de la Carretera Interoceánica, por el cual el fundador del partido Perú Libre también es procesado, al habérsele denunciado por el cobro de sobornos.
El caso Ecoteva salió a la luz al detectarse la existencia de inmuebles comprados a favor de los allegados a Toledo, y de cuantiosos depósitos bancarios hechos en Costa Rica a la empresa del mismo nombre, cuya titularidad estaba a nombre de Eva Fernenbug, suegra del exmandatario.
El empresario Josef Maiman, ya fallecido y alguna vez implicado en este proceso judicial, confirmó, a través del mecanismo de colaboración eficaz, que el dinero depositado provenía de sobornos pagados a Toledo cuando era presidente, y no de una pensión que Fernenbug recibía por ser víctima del holocausto judío; versión inicialmente difundida por el expresidente.
El juicio oral que hoy reanudó el Poder Judicial comprende, además de a Karp y a su madre, a David Eskenazi, empresario que habría hecho los depósitos bancarios; así como los hermanos Avraham y Shai Dan On. El primero fue encargado de la seguridad de Toledo en Palacio de Gobierno durante los años en que este fue jefe del Estado.
La exprimera dama –nacida en Bélgica-, por su parte, viajó ayer desde Estados Unidos hacia Israel, país en el cual también tiene condición de ciudadana.
