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Legislador oficialista dice que dinero corresponde al pago de 8 años de “asesoría” y en el caso del empleado de PPK, a los “11 años de servicios” a PPK
El presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) transfirió $89 mil dólares a una cuenta del congresista oficialista Gilbert Violeta, y más 600 mil dólares a su chofer, según un informe de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
Esto lo reveló el programa Panorama a través de su cuenta de Twitter, lo que ha despertado la sorpresa en todo el país, principalmente el depósito, efectuado por el mandatario, de 600 mil dólares a un chofer que trabaja en Palacio de Gobierno.
Tras la revelación, el parlamentario señaló que “no hay nada relevante” en el documento que se entregó a la prensa. Según Violeta, esta información revela “la desesperación del fujimorismo de desprestigiar al mandatario, pues el pedido de vacancia ha perdido fuerza en el Parlamento”.
Violeta dijo que las trasferencia a su nombre se deben a pagos a lo largo de 8 años y que se debe a que trabajó como asesor del mandatario.
Sin embargo, se desconocía la existencia de un antiguo vínculo laboral entre Pedro Pablo Kuczynski y Gilbert Violeta. Lo único que se sabía del ahora congresista Violeta, fue su no esclarecida relación con el encarcelado Rodolfo Orellana Rengifo, sindicado como el cabecilla de una organización que estafó a centenares de personas y se apropió de más de un centenar de propiedades, muchas de ellas del Estado.
“Se intenta presentar estos montos como estratosféricos, como si fuesen fondos que, de repente, aparecieron en la cuenta del chófer o de mi persona. En realidad se trata de pequeños montos acumulados algo largo de muchísimos años de trabajo”, remarcó Gilbert Violeta para justificar la comprometedora información.
Lo más sorprendente fue la explicación relacionada a la transferencia de $600 mil dólares al chófer de Palacio. Según Gilbert Violeta, este depósito corresponde aclaró que es por 11 años de trabajo, es decir, un sueldo de $4,500 dólares mensuales.
El congresista cuestionó que el documento reservado haya llegado a manos de la prensa antes de que los miembros de la Comisión Lava Jato lo tengan en su poder. “La intención (de difundir el informe) es política, es crear una cortina de humo”, afirmó. También refirió que el documento de la UIF no constituye un elemento probatorio.
