IZQUIERDA CANTINFLESCA

0
2129

Veronika MendozaLa izquierda peruana sigue transitando por la ruta de las ambigüedades y sin definiciones claras respecto a su posición sobre la segunda vuelta electoral que se realizará el próximo 5 de junio.

Ayer, Verónika Mendoza volvió a manifestar que su agrupación política no apoyará a Keiko Fujimori  ni a Pedro Pablo Kuczynski para el balotaje.

“Como Frente Amplio ya hemos señalado de manera absolutamente clara que no vamos a apoyar ni respaldar a ninguno de los dos candidatos, porque discrepamos profundamente en su propuesta política y su visión de país, nosotros queremos cambiar el modelo que ellos defienden”, afirmó.

Hasta ahí, todo bien, todo claro.  Pero luego volvió a lo de antes, al reiterar que “la peor amenaza que en estos momentos se cierne sobre el país es el retorno de la mafia fujimorista” y por ello dijo que iniciará una campaña de memoria para recordar a la población lo que significó la dictadura fujimorista.

¿Cómo evitar que llegue el fujimorismo al gobierno si tampoco apoya al candidato adversario, es decir, Pedro Pablo Kuczynski?

La congresista electa Indira Huilca reforzó la idea de su lideresa, señalando que el  Frente Amplio no ha llamado a votar viciado. Entonces, ¿cuál es la posición correcta de esta agrupación?

No entendemos por qué la señora Verónika Mendoza no toma el toro por las astas y transmite una posición clara sobre la segunda vuelta.

Consideramos que una posición más clara sería decir al electorado que el Frente Amplio rechaza que Keiko Fujimori sea elegida presidente del Perú, pero deja en libertad a su militancia si vota o no por PPK.

Lamentablemente para sus intereses en esta segunda vuelta solo hay dos candidatos y por tanto se deberá votar por el uno o por el otro, o también ejercer el derecho de votar en blanco o viciado.

Son alternativas válidas por las que el elector decidirá en las urnas el domingo 5 de junio. Y corresponde tomar esa decisión, principalmente, los que no votaron por Keiko Fujimori ni Pedro Pablo Kuczynski, y entre ellos están los que lo hicieron por el Frente Amplio.

De manera que, señora Verónika Mendoza, será mejor que se defina ante el país y no juegue con el doble discurso que le ha sido cuestionado siempre a los grupos de izquierda, que por eso nunca han mantenido firme su unidad. Solo se han cohesionado para fines electorales, por conveniencia política de sus “lideres”. Sino,  remontémonos a los años 80, cuando bajo el liderazgo de Alfonso Barrantes Lingán  alcanzaron la más alta votación como frente unificado.

Y después, se mantuvo la abierta diferencia de los distintos grupos que la conformaron y el pobre “tío frejolito” tenía que batallar para conservar la unidad de la izquierda, aunque sea para la foto, porque la procesión siempre se llevó por dentro.

Para estas elecciones generales ha ocurrido algo parecido, varios grupos se han unido en torno a su candidatura y algunos se sumaron cuando se hizo notorio su crecimiento en las encuestas. ¿Cómo se llama eso?

No olvidemos que quien se jugó su partido aparte fue Gregorio Santos, quien desde el penal logró pasar la valla electoral. Y después de la votación, desde el Frente Amplio se escucharon voces culpándolo de que Verónika Mendoza no llegara a la segunda vuelta.

Diga entonces con claridad, señora Mendoza, cuál es la posición de la izquierda. Si debe apoyar a PPK para impedir la llegada de Keiko Fujimori al poder, así discrepe con él, hágalo, o si prefiere que se vote en blanco o viciado, dígalo también. Pero no siga con su ambiguo discurso que para muchos ya les trae al recuerdo las célebres frases del gran Cantinflas: “Tons, como quien dice… ¡ahí está el detalle! Que no es lo uno ni lo otro, sino todo lo contrario”. Hasta mañana, amigos de La Primera.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here