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Aquí no se trata de hacer espíritu de cuerpo ni nada por el estilo. La denuncia penal por Traición a la Patria contra la directora del programa televisivo “Panorama”, Rossana Cueva toma ribetes de venganza por parte del gobierno saliente, que encabeza el presidente Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia, puesto que en opinión de especialistas judiciales la demanda se apoyaría en una interpretación de un absurdo jurídico. Aunque quien hace la denuncia es el Ministro de Defensa Jakke Valakivi, es fácil suponer que quien estaría detrás de esta maniobra de venganza judicial es la pareja presidencial. Pues como se recordará el programa en mención fue quien mostró las pruebas en el caso de las agendas perdidas de la Primera Dama y al parecer no quiere dejar el gobierno sin devolverle el golpe a quien los denunció.
La denuncia fue presentada por el ministerio luego de que “Panorama” difundiera, el último 17 de abril, un reportaje que destapó supuesta corrupción en el manejo del presupuesto destinado a labores de inteligencia policial y militar en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem). De acuerdo con el reportaje de la también denunciada periodista Karina Novoa, los fondos de las Fuerzas Armadas habrían sido malversados y justificados con el pago a colaboradores fantasmas. Además, se demostró que buena parte del dinero se gastó en restaurantes y en la compra de productos como pintura. En el reportaje se entrevistó a las personas indicadas como colaboradoras. Todas negaron haber vendido información al Ejército.
La periodista indicó que el Ministerio de Defensa los denunció pese a que cumplieron con una solicitud del ministerio: entregarle todos los documentos que presentaron en el reportaje. Esto, debido a que los papeles eran originales y tenían el rótulo de secretos. Lo cual no los hace secreto, ello se determina por su contenido. Entre ellos destacaban las declaraciones de pago a los colaboradores fantasmas. Cueva no se animó a acusar a un solo funcionario del Gobierno por la denuncia. Sin embargo, aseguró que sus periodistas sufren, en forma constante, actitudes hostiles por parte del primer ministro Pedro Cateriano.
Este caso llegó a la sesión permanente del Congreso. Con 20 votos a favor, tres en contra y cero abstenciones, se decidió citar al ministro de Defensa, Jakke Valakivi, para que explique las razones por las que se denunció a los periodistas Rosana Cueva, Karina Novoa y Jorge Ipanaqué (el tercer acusado). El pedido fue propuesto por el congresista Mauricio Mulder y avalado por otros parlamentarios como Rosa Mavila, Luis Iberico y Fernando Andrade.
Para el abogado constitucionalista Samuel Abad, la denuncia presentada por el Ministerio de Defensa (Mindef) contra periodistas de “Panorama” es una suerte de amenaza. “Me sorprende que un ministerio actúe en forma desproporcionada a raíz de un reportaje. Definitivamente es un mensaje pésimo”, sostuvo. Abad consideró que si la nota periodística tuvo errores, el Mindef pudo haber enviado una carta para solicitar la rectificación. Dijo que se deben tomar en cuenta los indicios de corrupción revelados en el programa. “No creo que los periodistas trabajen para revelar secretos de Estado. La denuncia es una exageración”, calificó.
Romy Chang, abogada penalista, coincide con Abad. La letrada considera que en este caso no se ha cometido ningún delito. “No estamos hablando de un secreto nacional que se haya revelado y así se afecte la seguridad nacional. En todo caso sería una tentativa de delitos imprudentes y la tentativa no se sanciona”, subraya. “Lo que me parece es que se está tratando de cubrir un mal manejo ocurrido dentro del Ministerio de Defensa con una acusación a los periodistas que hicieron el reportaje”, añadió.
En el reportaje de “Panorama”, el entonces jefe del Comando Especial Vraem, general EP César Astudillo Salcedo, reconoció indicios de corrupción en los pagos a supuestos colaboradores y en los consumos hechos por militares en restaurantes de Pichari (Cusco).
Lo que también trataría de hacer el Ministerio de Defensa con esta denuncia es sembrar precedente y atemorizar a la prensa para que no investigue a fondo las denuncias que le puedan llegar referidas a las Fuerzas Armadas. Es importante resaltar la rápida reacción de los miembros de la Sesión Permanente del Congreso para llamar al ministro Valakivi para que dé las explicaciones del caso. El ministro a los que debería denunciar como traidores a la patria son los que resulten responsables de los malos manejos al interior del Ejército como producto de la denuncia realizada por Panorama. Y sobre todo declarar en emergencia su sistema de inteligencia pues así como se han filtrado los documentos mostrados en el programa televisivo de igual manera se puede filtrar otros documentos aparentemente secretos que comprometan a la seguridad nacional. Una vez más quieren castigar al mensajero y eso es inadmisible. Hasta mañana mis amigos de Primera.
