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España. El jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, admitió que maneja la fecha del 2 de agosto para abrir el debate investidura, de forma que se sometería a primera votación de la Cámara al día siguiente.
Dado que sigue pensando que hay que ir a la investidura para ser elegido presidente, insistió en que si no tiene apoyos suficientes abrirá un periodo de reflexión con los partidos para ver qué hacer.
Así lo aseguró Rajoy en una conversación informal con periodistas en el Congreso, después de almorzar con su equipo en un restaurante situado en las inmediaciones de la Cámara y relatarles los detalles de la reunión que mantuvo con el líder del PSOE, Pedro Sánchez.
En esa charla, Rajoy expresó a los informadores su voluntad de ir a la investidura y confesó que quiere que sea la semana el 2 de agosto, ya que la anterior comienza con el festivo del apóstol Santiago.
Señaló que si no tiene los apoyos abrirá un periodo de reflexión, lo que "no quiere prejuzgar que no se vaya" a ese debate. "Si tuviera la certeza total de que es imposible ser investido abriría un periodo de reflexión con los partidos", dijo él mismo en rueda de prensa.
Si el debate de investidura se inicia el 2 de agosto, la primera votación tendría lugar el miércoles 3 y la siguiente –en ese caso ya sólo sería necesario tener una mayoría simple– se celebraría el 5 de ese mismo mes.
De esa forma, empezaría a correr el reloj y si no hay acuerdo para investir presidente, las terceras elecciones generales serían el 27 de noviembre.
