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Sus hijos estuvieron presentes en el partido de despedida, donde triunfaron contra el Almería.
Gerard Piqué, luego de 14 años y medio de jugar en el primer equipo del Barcelona, vivió su último partido en el Camp Nou. Los dirigidos por Xavi se llevaron el triunfo ante el Almería por 2-0. Piqué fue el gran protagonista desde el primer momento, fue ovacionado en el calentamiento y dio una vuelta de honor por el campo al terminar el juego.
El ahora exfutbolista tuvo una noche especial acompañado de sus dos hijos, Milan y Sasha, quienes desde muy pequeños han sido partícipes en los momentos importantes del exdefensa del Barza.
Las miradas estuvieron concentradas en el central, quien anunció su sorpresivo retiro del fútbol profesional el último 3 de noviembre. Sumó su partido oficial número 616 con la camiseta azulgrana. Además, fue el defensa del Barcelona que más encuentros ha disputado en toda su historia, ganando 30 títulos.
En el minuto 84 con una tremenda ovación de dos minutos, los abrazos de sus compañeros y el aplauso de los jugadores del Almería, Piqué se retiró del campo.
El catalán, se emocionó en el Camp Nou cuando habló al terminar el partido contra el Almería. Piqué lloró al dirigirse a los hinchas.
«Primero quiero dar los agradecimientos porque si no me olvidaré. A los compañeros, al staff, a los doctores, físicos, gente del gimnasio, material, a los que nos ayudan día a día sea más fácil. A la junta por todos estos años», manifestó.
«En la vida cuando te haces grande y a veces querer, es dejar marchar. De tanto amor y pasión entre el Barcelona y yo, creo que era el momento de dejarnos un espacio. una poco de aire. Y estoy convencido de que un futuro volveré a estar aquí», expresó el ‘culé‘.
