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Importante la reunión sostenida ayer por el Pleno del Jurado Nacional de Elecciones y el Tribunal de Honor del Pacto Ético Electoral con los dos candidatos, Keiko Fujimori Higuchi y Pedro Pablo Kuczynski, que disputarán la segunda vuelta electoral a realizarse el próximo 5 de junio.
Y destacamos la cita porque, en ella, los dos aspirantes al sillón de Palacio de Gobierno han asumido tres compromisos que esperamos respeten por el bien del proceso electoral en marcha, algo que no ocurrió en la primera vuelta en que primaron los insultos, agravios y faltas que costó sanciones que algunos no quisieron aceptar.
Por ello, es importante que ambos se comprometan a tener un especial cuidado en el desarrollo de sus campañas acorde con lo que establece la Ley de Organizaciones Políticas que incluye las sanciones para quienes entreguen dinero o dádivas a cambio de votos, aunque por la experiencia reciente de la primera vuelta, será difícil que caigan en esa tentación.
Ayer, tanto Keiko Fujimori como PPK han reiterado además el compromiso de respetar el Pacto Ético Electoral y desarrollar una campaña de propuestas para resolver los problemas del país.
Ya hemos señalado la importancia de este punto. De las propuestas que expongan los postulantes de Fuerza Popular y Peruanos por el Kambio sobre los temas más sensibles para la población, como el de la inseguridad ciudadana, la generación de empleo, legislación laboral, agua, energía eléctrica, sistema privado de pensiones, programas sociales, crecimiento de la economía, educación y salud, para captar los votos que les fueron adversos en la primera vuelta.
Pero esas propuestas también deben ser trascendentales para captar el bolsón de los más de seis millones de electores conformados por los que no asistieron a sufragar, los que emitieron sus cédulas en blanco y los declarados nulos.
Para ello deberán acercarse más a la población, visitar las localidades a las que por diversos motivos no pudieron llegar en la primera vuelta, a fin de hacerles llegar sus programas de gobierno y alternativas de solución a sus demandas de agua, luz, escuelas y centros de salud, entre otras.
Los compromisos asumidos, además de reformar el sistema electoral, es desde ya un avance para ver con optimismo el futuro del país a partir del 28 de julio.
Sin embargo, en lo que sí dudamos, es en la campaña de agravios al contrincante, muy usual para “bajarle preferencias”. Esperamos que los tradicionales puyazos no lleguen a los insultos, para no degenerar la campaña.
El domingo, por ejemplo, en un programa de televisión, Pedro Pablo Kuczynski se refirió a la segunda vuelta como si se tratara de un ring de box, en la que dos pugilistas se disputan a golpes la corona.
No creemos que esa sea la intención del candidato de Peruanos por el Kambio para remontar la gran ventaja que le sacó Keiko Fujimori en los comicios del 10 de abril. La segunda vuelta es una nueva historia, es comenzar de nuevo y dependerá de la estrategia que apliquen cada uno para lograr el objetivo. Por lo pronto, PPK arranca esta fase con ventaja en las encuestas, y en los próximos días veremos si esa diferencia se mantiene o se revierte.
Ojalá prime la cordura, la prudencia y tolerancia para que en las seis semanas que restan para el día de la verdad, el pueblo esté bien informado de lo que ofrece cada uno, y así poder decidir a quién endosar su voto. Que todo sea por el bien del Perú. Hasta mañana, amigos de la Primera.
