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Votaré por el NO a la admisión de la moción de vacancia presidencial. Es un voto de conciencia y explico brevemente mis argumentos.
Como bien sabe el Perú he sido ministro del Interior (modestamente, con una altísima aprobación) además de Alto Comisionado en la lucha contra la minería ilegal, cargos que me han permitido conocer por dentro como funciona la administración pública y, por lo tanto, sé todo lo que significa un relevo de ministros. No es nada fácil mover y cambiar piezas y, al mismo tiempo, hacer que la maquinaria siga funcionando.
¡Si eso ocurre en un ministerio y en tiempos “normales” imagínense cómo debe ser un cambio presidencial en plena pandemia, con miles de muertos, hambre y desempleo! A eso súmenle que los países más poderosos del planeta están viviendo ya la segunda ola del coronavirus, con estrictas medidas de seguridad y con el pánico instalado en sus gentes. Sería terrible hacer un brusco cambio presidencial en estas circunstancias.
Para un cambio de mando presidencial se empiezan a armar la transferencia de gobierno ni bien finaliza la primera o segunda vuelta electoral, según sea el caso, con todos trabajando de manera presencial. Y el equipo que entra es un equipo que ha venido trabajando el plan de gobierno con muchos meses de anticipación. Tras una vacancia presidencial reina la incertidumbre, nadie sabe quién asumirá qué, los ministerios quedan paralizados, los funcionarios no quieren firmar documentos para evitarse problemas, etc.
Dejo en claro que mi voto por el no a la admisión de la moción es con lo que se conoce hasta ahora: denuncias periodísticas, indicios y muchos rumores. No he visto hasta ahora un video demoledor como el de Vladimiro Montesinos comprándose congresistas o dándole millones de dólares a empresarios y dueños de medios, o el video sobre el canje del indulto a Fujimori por la vacancia de PPK.
Dejo también muy en claro que no me parece que Vizcarra sea inocente. Para mí hay indicios clarísimos de graves hechos de corrupción cuando era gobernador de Moquegua. Y corrupción es delito. Y los que deben juzgar y sancionar los delitos no son los políticos sino la justicia. Por lo tanto, si se le encuentra culpable debe ir a la cárcel.
En esa línea de razonamiento, el Congreso se equivoca al pedir la vacancia por “incapacidad moral”. ¡A alguien que ha cometido un delito no se le puede vacar por “incapacidad moral” sino meterlo a la cárcel por corrupto! Y eso, repito, lo tiene que decidir la justicia ni bien Vizcarra deje el cargo el 28 de julio del 2021.
Si pensara en mis intereses políticos personales fácil sería para mí votar a favor de que se admita la moción de vacancia pero jamás voy a traicionar mis principios de pensar siempre primero en el Perú y en los millones de peruanos que hoy más están preocupados por el pan del día que por la vacancia.
