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La exprocuradora Katherine Ampuero criticó la decisión de los jueces de la Sala Penal de Apelaciones Nacional -Rómulo Carcausto Calla y Sonia Torre Múñoz- que varió el mandato de prisión preventiva por el de comparecencia simple para tres representantes de las empresas socias de la constructora brasileña Odebrecht. “Con esta decisión, el Poder Judicial y estos jueces han dado un grave retroceso en la lucha contra la corrupción”, opinó. En esa línea, cuestionó los fundamentos de los magistrados para liberar a los ejecutivos Fernando Camet Piccone (JJ Camet), José Castillo Dibós (ICCGSA) y Gonzalo Ferraro Rey (Graña y Montero). Este último, desde el fallo de prisión preventiva en diciembre del año pasado, permanecía en una clínica local. “Los jueces no han valorado el acuerdo de la Corte Suprema en el que se determina que el lavado de activos es autónomo del delito fuente (colusión). Ellos dicen que como no hay suficientes elementos de convicción sobre colusión, tampoco lo hay para el lavado. Y en ambos delitos, la Fiscalía sí los ha presentado”, precisó. ¿A cambio de qué los empresarios trasladaron sus utilidades para Odebrecht? Para el pago de coimas al expresidente Alejandro Toledo a fin de adjudicarse la Interoceánica Sur”, remarcó.
Así quisiera verla exigiendo investigar a la Chacón por su casita de 700 mil Soles, o por 80 kilos de droga hallados en las oficinas de Kenji, o por las tierras obtenidas ilícitamente en el Norte por Becerril. Pero es como pedirle peras al olmo, la mafia no le permite chocar con la familia.