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Velásquez Quesquén advierte implicancias jurídicas y Héctor Becerril afirma que con su declaración el mandatario ha confirmado el delito de usurpación de funciones.
El viaje que realizó la primera dama Nadine Heredia a Brasil el año 2012 sigue dando que hablar, y ayer las reacciones se dieron respecto a las declaraciones que formuló el día anterior el presidente Ollanta Humala, quien dijo que fue él quien la envió para que lo represente, lo cual fue considerado ilegal por congresistas de la oposición.
Javier Bedoya de Vivanco, advirtió que la primera dama no puede representar al Presidente de la República porque no ostenta cargo público. Anotó que quienes viajan en representación del jefe de Estado son los ministros.
Dijo que “cada vez que el presidente (Humala) abre la boca, la mete peor”, tras anotar que los esfuerzos del presidente por defender a su esposa puede terminar comprometiéndolo.
Sobre la versión de la Cancillería, distinta a la del mandatario, Bedoya dijo que “cuando no se dice la verdad desde un principio, se cae al final en este tipo de contradicciones”.
Para el congresista Javier Velásquez Quesquén, lo dicho por Humala “es una ilegalidad”, porque “el Presidente no puede entregar la representación de su cargo a su esposa, a su chofer”.
Refirió que hay un mandato constitucional que establece que, para la representación del jefe de Estado están los vicepresidentes y los ministros.
Según dijo, las fotos difundidas el domingo en un programa periodístico confirman que Nadine Heredia viajó en representación del Presidente de la República, y en este caso Humala usa su inmunidad para proteger a su esposa”.
“Lo que ha declarado el presidente Humala es grave, porque tiene implicancias jurídicas. Es un boomerang”, remarcó.
El legislador Juan Carlos Eguren cuestionó las declaraciones del mandatario, señalando que “él puede encargar a su esposa que lo represente en el colegio de sus hijos, en un club vecinal”, pero no en una visita oficial.
Héctor Becerril, por su parte, dijo que con su declaración, el presidente Ollanta Humala solo ha reconocido la comisión de un delito: “usurpación de funciones de parte de su esposa”.
