‘EL PEZ POR SU BOCA MUERE”

Reza un dicho popular: ‘el pez por su boca muere’. Y eso es lo que puede suceder con el jefe de Estado, Ollanta Humala Tasso, quien el martes se inmoló a favor de su esposa Nadine Heredia y aseguró que todas las anotaciones que aparecen en sus agendas son disposiciones suyas, que dio en su calidad de presidente del Partido Nacionalista.

Abogados y especialistas en Derecho han opinado que lo dicho por el mandatario no es más que una estrategia bien pensada por su defensa para librar a la primera dama de lo que se le viene en los próximos días, cuando el fiscal de lavado de activos, Germán Juárez Atoche, decida formalizar la investigación preparatoria contra ella.

Claro, si el comandante Humala asume toda la responsabilidad, su esposa quedaría liberada de la investigación y sería él quien debe responder a la justicia, pero eso no es posible por el momento porque goza de la inmunidad que su alto cargo le embarga, y finalmente sólo él y a quiénes incluye en su resolución serán investigados.

Y cuando decimos a quiénes incluye, nos referimos al propio Presidente de la República, porque al haberse auto inculpado como el autor intelectual de todo lo que se registra en las agendas, su situación legal será más grave aún.

No olvidemos que en la investigación de las agendas de la señora Nadine Heredia, la fiscalía busca determinar si Humala Tasso recibió aportes irregulares en las campañas electorales de 2006 y 2011.

Además, en sus páginas hay anotaciones sobre supuestas reuniones con representantes de Odebrecht (OH), vinculada al caso Lava jato, y que de acuerdo a un informe de la Policía Federal Brasileña, el mandatario habría recibido una coima de tres millones de dólares para la ejecución de obras.

También consignarían anotaciones que comprometen al presidente y su esposa, sobre mal uso de fondos provenientes de aportes fantasmas desde Venezuela que sumarían ocho millones de dólares. También se refieren a cuentas depositadas en bancos suizos así  como los aportes que recibió Nadine Heredia en el año 2009 por la suma de 216 mil dólares.

De manera que la situación del jefe de Estado no es nada fácil. Ayer, la Comisión de Fiscalización del Congreso aprobó su preinforme sobre el caso de las agendas, y entre sus conclusiones recomienda que el próximo Parlamento Nacional, que asumirá funciones el 28 de julio, amplíe la investigación al presidente Ollanta Humala.

En su documento, la comisión legislativa acuerda pedir al Ministerio Público investigue a Nadine Heredia y a otras 25 personas, ante las evidencias del delito de lavado de activos, derivadas de las anotaciones contenidas en las agendas entre los años 2006 y 2011.

También se incluye al ex juez Edwin Yalico, quien en el año 2008 falló a favor del hábeas corpus que excluyó al presidente Humala del caso “Andahuaylazo”. Según el documento, el ex magistrado habría incurrido en delito de corrupción de funcionarios, tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito.

Así las cosas, creemos que su inmolación le costará más caro de lo que imaginó el Presidente de la República, porque se da por descontado que su esposa de todas maneras será investigada por supuesto delitos de lavado de activos, y él tendrá que someterse a la justicia por todo lo que dice autorizó anotar en las famosas agendas, así sus ‘ayayeros’ del Partido Nacionalista digan que se trata de una venganza política. Hasta mañana, amigos de La Primera.