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Cuatrocientos internos, entre peruanos y extranjeros del Penal Modelo Ancón II participaron de una mañana artística cultural, gracias a la Fundación A Kiss for all the World y la Sinfónica Nacional del Perú como parte del trabajo de extensión social que realizan en el país.
Violines, violas, violonchelos, timbales, saxofones, arpa, entre otros, fueron los instrumentos, que en vehículo especial llegaron hasta el centro carcelario, donde ochenta músicos profesionales dirigidos por el español Iñigo Pirfano, ofrecieron un repertorio de música clásica por espacio de dos horas. Desde el patio principal del recinto, el segundo vicepresidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Gustavo Adolfo Campos Peralta, manifestó su especial agradecimiento a ambas instituciones por llevar arte y cultura hasta el interior de las prisiones.
“El pasado 3 de junio, la Sinfónica Nacional de Arequipa estuvo en el penal de mujeres de Socabaya, hoy ustedes están acá. Esto nos reconforta, pues es una muestra del interés y compromiso que tienen con nuestra población vulnerable”, señalo la autoridad penitenciaria.
La parte emotiva estuvo a cargo del Grupo Raíces, conformado por diez (10) internos músicos autodidactas, quienes regalaron a los asistentes dos piezas andinas logrando arrancar lágrimas y aplausos de algunos de los más experimentados músicos. Para Marthinet Avila Salinas, directora del Penal Modelo Ancón II, el desarrollo de la actividad entre su personal y población albergada fue un verdadero privilegio.
“Me siento muy complacida, pues la música es una terapia, un romper el silencio para llegar al alma”, anotó la funcionaria. En la actualidad el centro carcelario cuenta con 1, 650 internos, de los cuales 1,253 son varones y 397 mujeres.
