LA LEY ES LA LEY

La ley debe cumplirse nos guste o no, es una verdad universal que nadie debe negar ni oponerse. Y vamos a referirnos a la observación efectuada por el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) del Jurado Nacional de Elecciones que rechaza la inscripción del tribunal electoral del Partido Todos por el Perú, que tiene como candidato presidencial a Julio Guzmán, no solo por la protesta del aspirante al sillón de Palacio de Gobierno, sino porque el hecho nos lleva a reflexión.

El candidato ha culpado a una “mano negra” que quiere sacarlo de carrera justo en el momento que –dice- empieza a subir en las encuestas. ¿Mano negra de quién? Guzmán no lo ha dicho, pero da a entender que proviene de sus adversarios electorales. Pero esta suposición, lleva a otras interrogantes: ¿sus rivales políticos tienen influencias en el Jurado Nacional de Elecciones para dirigir una decisión como la del ROP? ¿O su rival es la misma autoridad electoral? Esto sí es grave.

Fernando Rodríguez, director del ROP, ha rechazado esas imputaciones y respondido que la resolución fue emitida porque Todos por el Perú incumplió con las normas que establecen los procedimientos y plazos que se deben seguir en un proceso electoral.

Aclaró el funcionario que fueron los dirigentes de Todos por el Perú quienes no cumplieron lo que establece su propio estatuto y, además, las observaciones que alcanzan también al cambio de color del símbolo del partido le fueron comunicadas a la agrupación en diciembre pasado. Entonces, ¿viene la mano negra de su propio partido?

No vamos a buscar las respuestas, pero sí consideramos necesario recordar a Guzmán y a todos los candidatos, a sus partidos y dirigentes, que las leyes, les guste o no, por más dura que sea, tienen que cumplirse. Acaso ¿no conocen las normas electorales que establecen los procedimientos y plazos a seguir para participar en una contienda  electoral?

Entonces, no culpen a otros de lo que ustedes mismos no cumplen.

Lo que pasa es que las pugnas y divisionismos que se observan en las mismas agrupaciones llevan muchas veces a cometer infracciones a las normas. Por ejemplo, el parlamentario Heriberto Benítez de denunciado –con documentos en manos – que su exclusión de la lista de candidatos al Congreso por el Partido Nacionalista es ilegal y amenazado impugnarla cuando sea inscrita en el Jurado Electoral. Eso lo determinará el JNE.

Otra reflexión a todo esto es la falta de celeridad de la autoridad electoral para resolver por ejemplo la inscripción de los candidatos presidenciales. Hace casi un mes que se presentaron las solicitudes de las planchas presidenciales, y hasta ayer eran 15 de los 19 postulantes  a Palacio de Gobierno los que ya tienen luz verde para participar en las elecciones generales 2016.

Los candidatos, inscritos ya oficialmente y no, están ya en campaña, se están movilizando, presentando en los debates y realizando mítines no solo en Lima sino en el interior del país. Y las encuestas están considerando a todos. ¿Qué pasaría si a estas alturas del partido se decide sacar de carrera a uno de ellos? Es cierto, se dirá que no cumplieron las normas, pero ¿por qué demorar tanto la decisión?

Las autoridades deben también poner de su parte en el proceso y actuar con más celeridad para emitir sus resoluciones. Faltan 70 días para las elecciones y no es posible que cuatro candidatos presidenciales no sepan aún si tendrán luz verde para participar.

Ahora bien, si es cierto que el ROP envió en diciembre las observaciones al Partido Todos por el Perú, ¿de qué se queja entonces Guzmán? Debería reclamar a sus dirigentes por qué no las han subsanado aún. Si bien los partidos y candidatos deben cumplir lo que establecen las normas, las autoridades deben actuar también con prontitud para resolver. ¿Demora tanto detectar si se cumple o no con la ley? Hasta mañana amigos de La Primera.