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Desde el gobierno del encarcelado Alberto Fujimori hasta el del investigado Ollanta Humala, la compra de armamentos militares y el equipamiento a la Policía Nacional, ha sido uno de los rubros más cuestionados por las graves acusaciones de los silenciosos negociados que en todas ellas ha existido, provocando miles de millones de dólares en pérdidas para el Estado.
Y la gestión de Pedro Pablo Kuczynski parece no escaparse de esta mala costumbre. Antes y después de la reunión que mantuvo con su homólogo estadounidense Donald Trump, PPK guardó en absoluto silencio uno de los principales propósitos de su viaje: “comprar muchas armas a los Estados Unidos”.
¿Por qué PPK ocultó que habló con Trump sobre el interés del Perú en adquirir armas militares? ¿Cuál es la razón que lo llevó a ocultar este deseo de su gobierno? ¿Es acaso, que como en los gobiernos pasados, se busca utilizar miles de millones de dólares para comprar armas bajo el amparo del “secreto militar” para que no exista una revisión de las cuentas?
Antes de viajar, Kuczynski dijo su agenda: “Con Donald Trump vamos a hablar, sobre todo, de proteger el libre comercio en las Américas y en el mundo. Vamos a hablar de las perspectivas políticas y también de nuestros conciudadanos que viven en Estados Unidos. Un tema fundamental en Estados Unidos son las perspectivas económicas, porque es nuestro segundo mercado de exportación”. En ningún momento anunció que dialogaría sobre compras militares.
Sin embargo, la actitud nada transparente de PPK y su estrategia de “mantenerlo en secreto” no le sirvió de nada, porque ha sido el propio presidente Donald Trump, quien reveló los planes de Pedro Pablo Kuczynski.
“Va a comprar muchos de nuestros vehículos militares. Son vehículos grandiosos”, dijo Trump tras la reunión con Kuczynski en la Oficina Oval.
Pero eso no ha sido todo, sino que un funcionario de la Casa Blanca comentó que Trump planeaba hablar de temas de seguridad regional durante la reunión, incluyendo los esfuerzos antinarcóticos y antiterrorismo, dejando entrever que PPK no mostró ningún interés sobre estos casos.
¿DEFENSA A TOLEDO?
Un hecho que no ha pasado inadvertido fue el comportamiento del embajador del Perú en los Estados Unidos de América Carlos Pareja Ríos, quien de manera sorprendente cortó el diálogo que mantenía el presidente con los periodistas peruanos y extranjeros en la puerta de la Casa Blanca, justo en el momento en que la prensa buscaba conocer detalles del proceso de extradición de Alejandro Toledo.
Las interrupciones de Pareja fueron en dos oportunidades y de manera “nada diplomáticas”, como lo calificaron algunos funcionarios estadounidenses que presenciaron los incidentes.
