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En ceremonia de condecoración en Palacio de Justicia, la máxima autoridad judicial, recibió la distinción por su destaca trayectoria en el año del Bicentenario de la creación de la Corte Suprema, en diciembre 1824
En reconocimiento a su destacada trayectoria profesional e institucional, el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo Vela, recibió hoy la condecoración Palmas Sanmartinianas y Diploma de Honor por parte del Instituto Sanmartiniano del Perú.
La distinción fue otorgada por el presidente del Instituto Sanmartiniano del Perú, Carlos Alfonso Monja Manosalva, en acto solemne de develación del Busto del General Libertador Don José de San Martín, ceremonia que presidió el doctor Arévalo Vela, en Palacio de Justicia.
“Recibo esta condecoración de las Palmas Sanmartinianas que llevaré con honor y siempre tendré presente”, expresó la máxima autoridad judicial.
En el evento participaron el embajador de Argentina en Perú, Enrique Luis Vaca Narvaja; importantes autoridades del Estado, como jueces y juezas supremos.
Javier Arévalo Vela, en su discurso, expresó, a su vez, que el busto de José de San Martín, en el salón Vidaurre de Palacio Nacional de Justicia, es “un acto de justicia” al libertador del Perú, quien representa un ejemplo por su vocación de servicio, de renuncia al poder y respeto a la ley y juridicidad.
“Hoy como presidente del Poder Judicial y como miembro de la Corte Suprema voy a participar en un acto de justicia al hombre que nos dio la libertad, un defensor de la legalidad y respetuoso de la independencia judicial, que merece tener un lugar en el Poder Judicial. Un lugar físico, ya lo tiene en la historia, que simbolice su creencia en la ley y su respeto por la juridicidad”, sostuvo.
Así, la autoridad judicial recalcó que el ejemplo del libertador San Martín es eterno, porque, “pudiendo quedarse en el Perú con todo el poder y la gloria, renunció”. Agregó que el general San Martín era un convencido de que el Poder Judicial tenía que ser independiente para garantizar la libertad de los ciudadanos.
De ese modo, la escultura de San Martín que engalana ahora el Palacio de Justicia, remarcó el doctor Arévalo Vela, es un “homenaje a nuestros antepasados que derramaron su sangre y contribuyeron para que el Perú sea una república libre e independiente”.
