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A más de un mes de la suspensión de las clases en todo el Perú, la “educación virtual” aún no encuentra un rumbo. Lo cierto es que la gran mayoría de los colegios no están preparados para dictar clases on line, sencillamente porque no tienen personal capacitado, sin acreditación ni certificación alguna que los califique como expertos con capacidad de dar clases digitales. A pesar de ello, los colegios particulares insisten en cobrar las pensiones mensuales.
Los padres de familia están desorientados y preocupados, porque desde que se decretó la medida de aislamiento social, una inmensa mayoría ha dejado de trabajar y no tienen cómo afrontar sus gastos.
Ayer, el ministro de Educación, Martín Benavides, aseguró que el Gobierno no puede intervenir en el precio de las pensiones de los colegios privados y señaló que un descuento en estas debe ser el resultado de un diálogo entre los colegios y los padres de familia.
“En los precios no (podemos intervenir), no hay control de precios. Nosotros tenemos una rectoría sobre educación que comprende educación pública y educación privada. (…) Las instituciones educativas privadas tienen la obligación de comunicarse con sus comunidades educativas y explicarles la forma cómo van a afrontar este tema no presencial. Esa comunicación tiene que tener por un lado una parte académica donde le expliquen cómo van a hacer, obviamente no va a ser lo mismo”, aseguró.
