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El ministro de Sanidad de Turquía, Recep Akdag, afirmó tener pruebas del uso de armas químicas en el ataque de Siria que mató a por lo menos 58 personas. “Enviaremos estas pruebas a la Organización Mundial de la Salud (OMS). La humanidad no debe quedarse callada ante esto”, dijo en la ciudad de Erzurum a la agencia de noticias Anadolu.
Explicó que Turquía ha acogido en sus hospitales a 30 afectados y dos personas fallecidas en el ataque a Khan Shaykhun. También ofreció ayuda ante la emergencia. “Si hace falta personal sanitario, podemos enviar nuevamente”.
Turquía es otro de los países que ya condenó el fatal ataque. Además, ha atribuido la responsabilidad a las fuerzas del presidente sirio Bashar al-Assad y lo ha tildado de “crimen de guerra”. Sin embargo, el régimen niega la autoría y culpa al bando opositor.
Mientras tanto, hoy miércoles se llevará a cabo una reunión de emergencia en las Naciones Unidas solicitada por Francia y el Reino Unido para saber las primeras investigaciones del cobarde ataque.
Los tres países quieren que se vote el proyecto de resolución en la reunión del miércoles, aunque es no está claro si Rusia lo apoyará, según diplomáticos. El proyecto de resolución “condena en los términos más firmes el uso de armas químicas” en Siria, y manifiesta “indignación” por el uso de gases tóxicos en esta guerra, que azota el país desde hace seis años.
También pide a Siria que facilite planes de vuelo, diarios de vuelo y otra información sobre sus operaciones militares del día del ataque.
