URRESTI: Negarle el voto de confianza a un gobierno tan débil sería darle la espalda al pueblo

El precandidato presidencial de Podemos Perú, Daniel Urresti expresó su confianza en que, durante su presentación ante el pleno del Congreso, la presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez logre el respaldo de la mayoría de la representación nacional al plan de trabajo del gabinete ministerial que lidera desde el pasado 18 de noviembre.
“En las actuales circunstancias negarle el voto de confianza al gabinete ministerial de un gobierno tan débil como el gobierno del Partido Morado sería darle la espalda al pueblo ya que se agudizaría la incertidumbre y se postergaría la solución de los problemas sanitarios y económicos provocados por la pandemia del coronavirus”, manifestó.
En ese sentido, lamentó que el gobierno que encabeza el congresista morado Francisco Sagasti se haya debilitado tanto en apenas una quincena cuando, lo usual, es que un presidente de la República entrante tenga un periodo de “luna de miel” con la población que dura por lo menos tres meses.
“El gobierno morado se ha deteriorado en menos de 15 días exclusivamente por errores propios. El expresidente Vizcarra podía, por lo menos, culpar al Congreso pero hoy Sagasti tiene las manos libres para gobernar”, afirmó.
El también presidente de la Comisión de Defensa y Orden Interno del Congreso puso como ejemplo las marchas y contramarchas del presidente Sagasti en el caso del hoy exministro del Interior, Rubén Vargas, y el controvertido descabezamiento de los altos mandos policiales.
“El domingo, a nivel nacional, le da su respaldo total al ministro Vargas y en menos de 48 horas le está tomando juramento a otro ministro. ¡No puede gobernar con tantas indecisiones! Sinceramente, no quiero creer que el dueño del Partido Morado le está susurrando soluciones al señor Sagasti. Si es así, pues que deje de hacerle caso porque lo están empujando al error”, señaló.
Urresti también demandó una pronta solución a las demandas de los miles de agricultores de Ica que se han visto obligados a salir a bloquear las carreteras porque ya no soportan la explotación de las poderosas empresas agrícolas y de las services.