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A tres semanas de celebrarse las elecciones generales, el panorama electoral sigue tan confuso que nadie se atreve a vaticinar lo que ocurrirá de aquí al domingo 10 de abril. Por un lado las encuestas, por otro, las denuncias contra los candidatos y por último el pedido de exclusión contra Keiko Fujimori cuyo desenlace resulta incierto, con voces de ambos lados.
Los resultados de las encuestas que se muestran hasta hoy no esclarecen el panorama, y si bien muestran que tres candidatos pelean por el segundo lugar, lo que sí está claro es que nada está dicho aún, porque todavía se mantiene un alto porcentaje de indecisos, votos en blanco, nulos y de quienes pueden cambiar su voto cuando lleguen a las urnas el día de los comicios.
Y ante esos resultados, los candidatos empiezan a pelearse los votos que habrían dejado Julio Guzmán y César Acuña, y en esa pugna se lanzan puyazos y acusaciones con la finalidad de reducirle preferencias de los electores. Desde Acción Popular, no dejan de vincular a Verónika Mendoza con el chavismo, por sus declaraciones a favor del régimen que ahora preside Nicolás Maduro. El candidato presidencial Alfredo Barnechea “lanzó la piedra” y después culpó a la prensa de crear un enfrentamiento con su adversaria del Frente Amplio. “Vitocho” García Belaunde también advirtió que la congresista que llegó al Legislativo con el nacionalismo, no ha hecho un deslinde con el gobierno venezolano.
Verónika Mendoza ahora se enfrenta a otras denuncias que la vinculan con el tema de las agendas y desde las mismas filas del Partido Nacionalista señalan la fuerte relación que mantuvo con la primera dama Nadine Heredia, como el congresista Daniel Abugattás que ha recordado que ella “era como la niña de los ojos” de la esposa del presidente Ollanta Humala. Esta guerra, ¿Le restará votos a la candidata del Frente Amplio? Cuidado que el tiro les puede salir por la culata y al final la campaña en contra la termina fortaleciendo.
Pero Verónika Mendoza no se queda atrás, sigue cuestionando al fujimorismo y sus mismos candidatos al Congreso han admitido haber participado en las marchas contra la candidatura de Keiko Fujimori.
El proceso de exclusión que se ha abierto a Keiko Fujimori por presunta entrega de dádivas en una actividad del Factor K, es también impredecible y nadie puede vaticinar en qué terminará. Pero en estos días previos varios de sus adversarios ya quieren que le bajen el dedo y la dejen fuera de carrera electoral. Piden que se le aplique la ley tan igual como se hizo con el candidato de Alianza para el Progreso, César Acuña Peralta. Otros ven difícil que la excluyan.
¿Se imaginan el panorama si el fallo le es adverso a la hija de Alberto Fujimori. La pugna por ese más de 30 por ciento de preferencias sería reñida y acaso hasta más de lo que se puedan imaginar.
No estamos a favor ni en contra de su caso, solo invocamos dejar que las autoridades electorales actúen con celeridad teniendo en cuenta el poco tiempo que ya queda para el día de las elecciones. Y la decisión que tome el Jurado Nacional de Elecciones debe ser acatada como corresponde.
Quedan tres semanas. Ojalá el debate se concentre en las ideas, propuestas, planes de gobierno, y no en asuntos que nada tienen que ver con lo que espera el electorado para poder decidir su voto. Pero por sobre todas las cosas, que la fiesta se lleve en paz. Hasta mañana, amigos de La Primera.
