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La reciente aprobación de la ley de reconstrucción de las zonas afectadas por el fenómeno de El Niño costero y la inminente aprobación de la ley -en debate en estos momentos en el Congreso- de excarcelación para reos mayores de 75 años, que beneficiaría directamente al expresidente Alberto Fujimori, serían el sello legal de un primer pacto de conveniencias entre Peruanos Por el Kambio y Fuerza Popular, las dos principales fuerzas políticas del país.
Los coqueteos oficiales se iniciaron durante el discurso del presidente Pedro Pablo Kuczynski en la ceremonia del reconocimiento como héroes a los comando de Chavín de Huantar, quien durante su discurso tuvo palabras de elogio hacia el ex presidente Fujimori y en cuya ceremonia estuvo presente y muy sonriente Keiko Fujimori lideresa de Fuerza Popular.
Ayer, Kenji Fujimori, el controvertido delfín fujimorista, fue el encargado de retrucar el gesto político y fortalecer el pacto al descender de su escaño y acercarse al premier Fernando Zavala para estrecharle la mano y conminar diplomáticamente a su bancada a darle el apoyo necesario al proyecto de ley de reconstrucción que Zavala había llevado bajo el brazo. Y como se suponía se aprobó sin mayor inconveniente.
Hoy, Keiko Fujimori tuitió: “El Parlamento ya cumplió con su trabajo demostrando capacidad técnica y de consenso. Ahora, manos a la obra presidente PPK, a reconstruir el país”, escribió. Como diciendo ya cumplimos nuestra parte ahora les toca a ustedes pepekausas.
Quien estaría confirmando públicamente su corazón naranja es el congresista Roberto Vieira, quien fue el que presentó el proyecto de ley que busca otorgar el beneficio de arresto domiciliario a personas mayores de 75 años de edad, que hayan cumplido un tercio de su condena y que presenten una enfermedad, quien admitió muy orondo haberlo presentado pensando en el encarcelado ex presidente Alberto Fujimori. Cabe recordar que Viera fue expectorado de Peruanos Por el Kambio al ser acusado de ser la quinta columna infiltrada en el movimiento. Sospecha que él mismo se ha encargado de confirmar con la autoría del mencionado proyecto.
Todo hace suponer que el proyecto de ley de arresto domiciliario se va afirmar en el transcurso de las horas y con ellos se equipararía la balanza en un “toma y dame” en la aprobación legislativa entre los ppkausas y los anaranjados. Este pacto se veía venir como cuestión de fondo, lo que no cuajaba era en la forma en que se iba a plantear. La mesa de juego en este caso resultó ser el Poder Legislativo, donde se vienen repartiendo la aprobación de leyes portadoras de conveniencias políticas y personales como si fueran naipes en un oscuro juego político.
Este tipo de pactos son firmados con palabras y a las palabras se las lleva el viento. Así también estos acuerdos son de tiempo indeterminado y buscan saldar temas concretos. El peligro estaría en la prolongación o en la repetición de este tipo de acuerdos en temas de corrupción, pues como se sabe PPK tiene mucho que explicar al respecto. Sobre todo en lo que le corresponde durante su ejercicio como ministro y premier durante el gobierno de Alejandro Toledo y su proximidad de este con el escandalo Lava Jato, específicamente con Odebretch. Y no está demás decirlo que Fuerza Popular arrastra un rosario de denuncias y demandas de investigación de larga data. Coincidencias que podrían propiciar futuros compromisos que serían peligrosísimos para el país. Así están las cosas en el ambiente político nacional. Hasta mañana mis amigos de Primera.
